El presidente del PP extremeño, Carlos Floriano, formalizó ayer su renuncia al escaño en la Asamblea para incorporarse como diputado al Congreso. Floriano, elegido en mayo por cuarta legislatura consecutiva como parlamentario regional, dejó en todo caso claro que seguirá presidiendo el grupo parlamentario, pese a no formar ya parte de la Cámara extremeña.

Según señaló, la estructura del Grupo Popular en la Asamblea seguirá siendo la misma, con él como presidente, Pilar Vargas como portavoz y Cristina Teniente como secretaria general. "El presidente del grupo voy a seguir siendo yo", afirmó, ratificando lo anunciado hace unas fechas por el secretario regional del PP, César Díez Solís. Para ello, los dirigentes populares se basan en que el Reglamento de la Asamblea no prohíbe expresamente que alguien que no sea diputado presida un grupo parlamentario.

De este modo, queda en el aire saber quién dirigirá los debates e intervendrá en las sesiones más relevantes, reservadas habitualmente al diputado que preside el grupo.

Esta situación se mantendrá hasta el congreso que el PP celebre "hacia el otoño" para renovar la dirección en Extremadura. Dirigentes del PP como el exalcalde de Mérida, Pedro Acedo habían pedido que dicho congreso se celebrase antes del verano, inmediatamente después del nacional, que es en junio, argumentando además que el mandato de la actual dirección terminó hace meses al cumplir su ciclo de tres años.

NOSTALGIA En su despedida como parlamentario regional, Floriano aseguró haber "aprendido mucho" en los 13 años que ha permanecido en la Cámara, y calificó como "verdadero honor" que los extremeños le hayan elegido en varias ocasiones. Asimismo declaró llegarse "un tanto nostálgico" en la hora de su marcha, ya que "llegué a esta casa con 28 años y me voy con 41".

Del mismo modo, declaró su satisfacción por el apoyo de partido a lo largo de estas más de tres legislaturas.

Por lo que se refiere al congreso del PP, el presidente de los populares extremeños, que ha insinuado que no se presentará a la reelección aunque no lo ha expresado con claridad, manifestó que el proceso debe afrontarse "con toda naturalidad".

Según apuntó, se trata de un proceso normal "que no puede ser convertido en una crisis". Floriano manifestó que lo que ahora va a poner en marcha el PP es un procedimiento "democrático", donde no caben interpretaciones de crisis, "porque lo que es normal yo no lo quiero convertir en crisis, aunque entiendo que el PSOE sí quiera".

Poco después de hacer efectiva su renuncia al escaño en la Asamblea, Floriano presidió una reunión de los 7 diputados y senadores electos por el PP extremeño en la cita del 9-M. Tras este encuentro, el presidente del PP manifestó que este grupo de representantes defenderán los intereses de la región aún por encima de los intereses de partido.

Según aseguró, las líneas de actuación de los representantes extremeños del PP en Madrid irán enfocadas a proponer medidas para mejorar la economía familiar y recortar las tasas de paro, y a vigilar que se cumplan los compromisos adquiridos con Extremadura, como es el caso de los plazos del AVE Madrid-Badajoz, y a velar por la solidaridad interterritorial.