El Consejo de Administración del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), entidad pública empresarial adscrita al Ministerio de Fomento, adjudica las obras de ejecución del primer tramo del AVE Madrid-Extremadura, comprendido entre Montijo y Badajoz. El tramo tiene una longitud de 20,2 kilómetros, que discurres por los términos municipales de Montijo, Badajoz y Pueblonuevo del Guadiana, según informa a Efe el Ministerio de Fomento. Este subtramo está a su vez incluido en el tramo Mérida-Badajoz de la línea de alta velocidad, de 53,3 kilómetros y la adjudicación ha correspondido a la Unión Temporal de Empresas (UTE), formada por GEA 21 y AGG Occidental Empresa Constructora S.A., por importe de 41.138.429,93 euros y un plazo de ejecución de 18 meses. Según Fomento, el proyecto de línea ferroviaria de alta velocidad Madrid-Extremadura, tramo Mérida-Badajoz, subtramo Montijo-Badajoz forma parte de la línea de alta velocidad Madrid-Cáceres-Badajoz, incluida en el Plan Estratégico de Infraestructuras y Transportes (PEIT) del Ministerio. El trazado se ha diseñado como doble vía de alta velocidad en ancho internacional (UIC) para tráfico mixto de viajeros y mercancías en todo el recorrido. Como elemento singular destaca el Puesto de Adelantamiento y Estacionamiento de Trenes (PAET) de Montijo, de 2.419 metros de longitud. El Ministerio de Fomento ha encomendado a ADIF la construcción de la línea de alta velocidad Madrid-Extremadura-Frontera Portuguesa en los tramos Talayuela-Cáceres, de 141,8 kilómetros y Cáceres-Badajoz, de 136 kilómetros. Ambas actuaciones suman un total de 277,8 kilómetros de recorrido. El proyecto del tramo Montijo-Badajoz contiene las actuaciones necesarias para la ejecución de las obras de infraestructuras como movimiento de tierras, reposición de servicios y servidumbres afectadas, estructuras, construcción de conexiones transversales que aseguren la permeabilidad viaria, acondicionamiento de las obras de drenaje y cumplimiento de las condiciones de la declaración de impacto ambiental. Según aseguró, los principales beneficios de la construcción del tramo y, consecuentemente, de la línea ferroviaria de alta velocidad Madrid-Extremadura, se traducirán en el aumento del confort, al establecer unas condiciones óptimas de rodadura y trazado. También aumentará la seguridad, con la adopción de tecnologías punta en los sistemas de conducción automática de trenes y la ausencia de pasos a nivel a todo lo largo de la línea.