La ejecución de las obras del corredor ferroviario de alta velocidad en Extremadura según el calendario anunciado por el presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, tras reunirse el martes con el jefe del Ejecutivo central, José Luis Rodríguez Zapatero, obligarían al Ministerio de Fomento a duplicar la inversión en la región en los cuatro años en los que se pretende acometer el trazado completo.

Así, no se trataría solamente de cambiar la fecha de finalización que figura en el proyecto de presupuestos estatales, y que fija el 2011 para acabar el tramo Navalmoral de la Mata-Cáceres, sino de realizar una reprogramación del gasto en el periodo 2007-2010.

Según anunció Ibarra, las licitaciones para redactar los proyectos de los cuatro tramos del AVE (Badajoz-Mérida, Mérida-Cáceres, Cáceres-Navalmoral y Navalmoral-límite con la provincia de Toledo) saldrían en lo que queda del 2005 y a lo largo del 2006. De manera simultánea, el próximo año tendrían que ir saliendo los concursos para la ejecución de obras, si se quiere que éstas arranquen, como señaló el presidente extremeño, en el 2007 en todo el trazado.

CASI 2.000 MILLONES Esto supone que las obras se concentrarían en el cuatrienio 2007-2010. Dado que el coste de la alta velocidad en su parte extremeña ronda los 2.000 millones, Fomento tendría que destinar una media de 500 millones de euros por año sólo a esta obra para cumplir el calendario.

Según la programación plurianual del proyecto de presupuestos para 2006, en el 2005 el ministerio y sus sociedades públicas (ADIF y AENA principalmente) tienen previsto invertir 277 millones de euros en la región. Para el año próximo, esta cantidad se eleva a 356 millones, que pasan a 470 millones en el 2007, 407 millones en el 2008 y 322 millones en el 2009.

En estas cantidades se incluye todo lo que se prevé gastar en carreteras, alta velocidad, ferrocarril convencional y aeropuertos.

De este modo, y a partir del 2007, los presupuestos de Fomento tendrían que elevarse en la región hasta superar de media los 900 millones de euros, sin contar con la posibilidad de que durante el periodo se inicien otras actuaciones también comprometidas, como las autovías de Levante, Badajoz-Granada o Zafra-Huelva, lo que elevaría aún más la inversión necesaria. Además, habría que sumar otros 18 millones de euros de reprogramación de la autovía Trujillo-Cáceres, que estaba previsto gastar en el 2010 y que, según señaló el presidente de la Junta, tendrán que invertirse antes, puesto que el compromiso es terminar esta autovía en el 2009.

ACORTAMIENTO DE PLAZOS Otra cuestión añadida para poder ejecutar el tren de alta velocidad según lo anunciado el martes es que las obras deberían realizarse al doble de la velocidad con la que se han hecho obras similares en otros corredores de AVE.

De este modo, mientras el corredor extremeño se acabaría en cuatro años, la denominada Y vasca (Vitoria-Bilbao-San Sebastián) se ejecutará, contando los plazos desde el inicio de las obras, en nueve años. Por su parte, el Santiago-Orense estará siete años en obras; el Madrid-Levante, ocho años; el tramo Zaragoza-Teruel, siete años, y el Figueras-Perpiñán, de apenas 44 kilómetros, seis años, según figura en los documentos del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF).