Franciso Castejón es físico nuclear, investigador del Ciemat y miembro de Ecologistas en Acción. El sábado se manifestó contra la instalación del cementerio nuclear en Guadalajara y ayer lo hizo en Montánchez. Y así seguirá haciéndolo en cada una de las regiones candidatas a acoger el ATC con el fin de frenar su instalación. Es de Aragón pero no le importa viajar a donde sea por defender su postura y dar a conocer los riesgos de una instalación de estas características.

Y así lo hizo ayer en Montánchez ante un salón repleto de manifestantes, antes de iniciar la protesta. A su juicio, la forma de gestionar el almacenamiento de los residuos de alta radiación que pretende el Gobierno central "no es una buena opción porque conlleva muchos riesgos". Pero tampoco conoce ninguna buena opción para ello. "Todas las posibilidades tienen problemas pero creo que es necesario primero abrir un debate con expertos y colectivos sociales para barajar la posibilidad menos dañina después de establecer un calendario de cierres de nucleares". El transporte y la posterior manipulación de los residuos en el propio cementerio son los riesgos más importantes para que Castejón se oponga a la instalación de un ATC en el país. "La dispersión de la radioactividad ante cualquier riesgo o amenaza podría ser muy grave para el medioambiente y para el desarrollo de enfermedades que afectan al sistema inmunológico".