Las negociaciones entre la empresa y los trabajadores han llegado a buen puerto en Fuentecapala, la empresa textil más grande de Extremadura, y también la que más empleo genera en Navalmoral de la Mata. Y lo ha hecho con el apoyo unánime de los trabajadores, refrendado en una asamblea celebrada a finales de la semana pasada, en la que se abordaron las fórmulas pactadas para reducir la plantilla durante los próximos dos años, a la espera de una recuperación de un sector muy afectado por la crisis.

El acuerdo define las condiciones del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que ha planteado la empresa y que afectará de una u otra forma a un total de 82 de los 226 empleados con los que cuenta en la actualidad, es decir, el 18% de la plantilla. A pesar de este dato, los representantes de los trabajadores están satisfechos con el resultado de una intensa negociación desarrollada a lo largo del último mes, en el sentido de que consideran la solución alcanzada una apuesta por la continuidad de la empresa y por el mantenimiento de los puestos de trabajo. Se trata de un ERE "flexible", puesto que su desarrollo varía en función de la recuperación económica y de la productividad de la empresa, que se ha comprometido a recuperar la mayor parte de los puestos afectados si las cuentas evolucionan dentro de los márgenes previstos.

La presidenta del Comité de Empresa, Monserrat Camacho, manifestó ayer la "satisfacción" general con la que los trabajadores --actualmente de vacaciones por el cese programado de la actividad-- han recibido el acuerdo, firmado este lunes en la sede de la Consejería de Igualdad y Empleo, que ha mediado en las negociaciones.

El presidente de la Federación de Industria y Afines de UGT, Leocadio Núñez, hace una valoración positiva de un acuerdo que sustituye los 60 despidos "a dedo" planteados hace nueve meses por una fórmula "negociada" y en la que la mayor parte de los despidos serán voluntarios. Según los primeros cálculos, no será hasta mediados de septiembre cuando comiencen a salir de la empresa los primeros trabajadores.

Lo harán por tres vías: prejubilaciones para mayores de 55 años, para un total de 27 empleados; reducciones de jornada laboral a la mitad (serán contratados los seis meses de mayor actividad del año), que afectará a 20 trabajadores; y despidos, con indemnizaciones incluidas, y el compromiso de ofertar un nuevo puesto de trabajo antes de que transcurran dos años, para 35 personas.

Además se protege al colectivo de entre 47 y 55 años de edad, que quedan excluidos de las medidas que se adopten durante los tres próximos años.

Esta novedosa fórmula es fruto de una intensa negociación de los representantes de los trabajadores con los mediadores contratados por la dirección de la empresa, un bufete de abogados con amplia experiencia en expedientes complicados, como los de RTVE o Telefónica.

Para la responsable nacional de Industrias del sector Textil de CCOO, Carmen Expósito, esta fórmula es pionera en Extremadura y podría sentar precedente. En su opinión, el ERE aprobado supone "una apuesta por el empleo" al dar a la empresa un "balón de oxígeno" durante los dos próximos años que le permitirá en el futuro continuar con su actividad en Navalmoral de la Mata. "Podríamos haber peleado por mejores indemnizaciones, pero la gente es consciente de dónde está y de que lo que se necesitan son puestos de trabajo", indicó.