La Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente ha renovado su apoyo al proyecto de Muladares Sociales de la asociación extremeña Amus para la conservación de aves necrófagas amenazadas.

La Asociación del Mundo Salvaje (Amus) de Villafranca de los Barros (Badajoz) ha indicado en una nota de prensa que el objetivo es «fortalecer y conectar colonias, rescatando ejemplares divagantes y creando nuevos puentes entre poblaciones andaluzas, portuguesas y extremeñas».

El proyecto comenzó con la creación de un primer punto de alimentación en la Zona de Especial Protección de Aves (ZEPA) de Sierra Grande de Hornachos para aportar comida destinada al milano real, buitre negro, alimoche y colateralmente a las águilas imperiales del valle del Matachel.Se trataba de «volver al sistema tradicional de aporte de biomasa procedente de la cabaña ganadera, pero organizadamente, a través de un punto de alimentación con reses de las fincas colindantes». Con el tiempo se ha logrado crear una red de ganaderos y entidades interesadas en formar parte de este proyecto, ha señalado. Además, ha recordado Amus, se ha creado un equipo de trabajo «muy heterogéneo», con representación de universidades, administraciones públicas, asociaciones de agricultores y ganaderos y la sociedad en general.

Estos muladares sociales, para los que el Gobierno central ha vuelto a dar su apoyo, permiten, además, realizar estudios biomédicos junto a un plan de seguimiento de ejemplares, «con el objeto de conocer más sobre la utilización del territorio y las amenazas de las especies de rapaces citadas», según Amus.