Gelem, Gelem : en romanó, "largo camino por recorrer". Es el título del himno de los romanós o gitanos. Un camino de siglos, que han recorrido desde sus orígenes hindús y que aún, en el siglo XXI, les queda por trazar. El Día Internacional de los Gitanos, conmemoró ayer, día 8 de abril, su quinto aniversario en Extremadura y la familia Suárez, de Mérida, lo celebró y por todo lo alto.

La familia Suárez "pertenece a una ancestral y tradicional casta gitana de Extremadura", aseguran. Viven para su familia y para su trabajo y luchan por su integración y su progreso. Conocidos como Los Pellejos , viven dispersos por toda Mérida. En esta Tierra de Pan, la Marochandé, los Suárez se dedican a la venta ambulante, aunque Tomás, ahora regenta el bar Los Pelles.

Su hermano, Miguel, además de ser vendedor en el mercado, preside la Asociación Gitana de Mérida. Su mujer, Antonia, se dedica con él, día sí y día también, a la venta en el mercadillo. Una jornada que para la familia Suárez transcurre desde las 6 de la mañana hasta las tres de la tarde, y vuelta a empezar.

Angela es la mayor de las hijas, y hasta hace una semana trabajaba de aprendiz de fontanería y electricidad. La pequeña, Amparo, estudia 6º de primaria, donde conocimiento del medio, al igual que a su prima Meme, es lo que más les gusta. Su otro sobrino, Fernando, quiere ser cocinero profesional, y Zurdo, otro de los primos, es vendedor ambulante desde los 14 años y tiene 28, "mi madre dice que mi cuna era una caja de zapatos".

Todos han estado en la tradicional ceremonia del río, para arrojar las velas y las flores al cuace del Guadiana, en recuerdo del éxodo gitano desde la India, en recuerdo de sus antepasados y, por encima de todo, en memoria de las víctimas gitanas del holocausto nazi.

En el recinto ferial, otro de los marcos de esta celebración, se ofrecieron tapas gitanas elaboradas por 15 gitanos y gitanas en el taller de Sole, del bar La Taberna. Más de 600 personas degustaron ensalada de patata y ajo machao, torrijas con leche cruda o migas gitanas.

Por su lado, la Asamblea se hizo eco ayer, del reconocimiento, que como pueblo, esta etnia reivindica. Juan Ramón Ferreira, su presidente, leyó la Declaración Institucional de los grupos parlamentarios y Diana Vara, interpretó a violín el himno Gelem, gelem .