A diez días de que finalice el año, el Gobierno y las comunidades apuran el plazo para tratar de cerrar un acuerdo que beneficie a las autonomías y palíe las deficiencias del sistema de financiación actual. El Ejecutivo defiende la compatibilidad de reuniones conjuntas con todas las regiones, y al mismo tiempo con cada una por separado, en respuesta a las críticas vertidas desde el PP tras las citas mantenidas con los presidentes de Cataluña y Andalucía, y que el PP dice que son "discriminatorias" y hechas "a espaldas de todos los españoles".
Frente a estas críticas, la Junta de Andalucía ha calificado la reunión del sábado de "fructífera" y se ha presentado como "garante" de que el acuerdo será multilateral entre regiones.
Por su parte, el presidente catalán, José Montilla, ha admitido que hay todavía "sombras" en el futuro de los catalanes pero también "motivos para la esperanza".
También el titular de la Xunta de Galicia, Emilio Pérez Touriño, tratará de "cerrar un acuerdo" con el jefe del Ejecutivo en breve.
El presidente de Valencia, Francisco Camps, pide al Gobierno una reunión con Rajoy para cerrar el modelo; mientras que su homólogo de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, dice que no admitirá "una solución rápida pactada con las grandes comunidades en población".
