El Gobierno ha descartado por el momento la construcción de algo más de 260 kilómetros de gasoductos, cuya inclusión en el documento de planificación energética 2002-2011 había sido solicitado al Ministerio de Industria aprovechando la revisión de este documento realizada el pasado año y que se hizo pública hace pocas semanas.

Los trazados rechazados corresponden a los gasoductos Villanueva-Castuera-Cabeza del Buey, de 71 kilómetros, y que debía estar finalizado el próximo año; Plasencia-Coria-Moraleja, de 50 kilómetros y con finalización también en el 2007; Lobón-Montijo-Puebla de la Calzada, de seis kilómetros e igualmente para el 2007; Villanueva de la Serena-Valdecaballeros, de 60 kilómetros y con horizonte de puesta en servicio en el 2008, y Plasencia-Navalmoral, de 65 kilómetros y que debería estar listo en el 2009.

Además, se elimina el ramal que desde Talavera de la Reina debía llegar a Plasencia --incluido en la programación anterior-- con un recorrido de 54 kilómetros.

ARGUMENTOS ECONOMICOS En los cinco primeros casos, el argumento utilizado por Industria para no incorporar estos gasoductos a las previsiones de aquí al 2011 es la misma: no están justificados económicamente, es decir, no se ha argumentado suficientemente la necesidad de realizar una fuerte inversión, de aproximadamente un millón de euros por kilómetro, para llegar a esas zonas.

En el caso del Talavera-Plasencia, se indica que en la anterior planificación fue calificado como actuación de tipo C, es decir, condicionada a que se diese una justificación de tal necesidad, y no se habría solicitado ni argumentado el cambio de calificación.

Por ello, el ministerio los incluye dentro del grupo de gasoductos que, o bien estaban en la planificación anterior "pero no se justificaba la demanda que debían atender", o bien se pidió que fueran incluidas en la nueva planificación "pero en ningún caso se ha justificado la existencia de demanda necesaria para llevar a cabo su construcción".

En el extremo contrario, tres trazados extremeños, que suman 95 kilómetros, sí han recibido el visto bueno de Industria, y se ha aprobado su construcción.

Se trata de los tramos Almendralejo-Villafranca de los Barros, de 19 kilómetros y que debe estar terminado el próximo año; Mérida-Don Benito-Miajadas, de 69 kilómetros y también para el 2007, y el ramal a Villanueva de la Serena, de siete kilómetros y que se prevé que esté en marcha en el 2009.

Estos tres trazados estaban en la planificación anterior calificados como de tipo C, es decir, a expensas de que se justificase su necesidad y demanda potencial, y han entrado en el nuevo plan al haberse determinado que económicamente están argumentados.

Del mismo modo, la nueva planificación del gas recoge el tendido de ramales del gasoducto para las centrales de ciclo combinado de Alange y Mérida, si bien su construcción se condiciona a que los proyectos se lleven efectivamente a cabo.

En total, el plan de conducciones para el suministro de gas en Extremadura contará con una inversión de 102 millones de euros, esto es, algo más de un millón de euros por kilómetro. Además, ya se han invertido otros seis millones en la mejora de la planta de compresión de Almendralejo, para dar respuesta a las nuevas demandas y que admitirá también gas procedente de Francia.

Por lo que se refiere a la conexión internacional del gasoducto de Badajoz con Portugal, Industria no prevé potenciarla a medio plazo, con lo que mantendrá su capacidad de transporte de 150.000 metros cúbicos por hora.