El Gobierno considera que la energía nuclear no es imprescindible para luchar contra el cambio climático ni para cumplir los objetivos del Protocolo de Kioto, y mantendrá su compromiso de reducir paulatinamente el peso de este tipo de energía en España.

Así lo manifestó ayer en Soria el secretario general para la Prevención de la Contaminación y del Cambio Climático, Arturo Gonzalo Aizpiri, quien subrayó que la energía nuclear tiene además un problema "no resuelto": los residuos radiactivos que genera, cuya actividad se prolonga durante miles de años.

Aizpiri advirtió que los efectos del cambio climático se están produciendo con más rapidez de la prevista. Citó como ejemplo que en España la temperatura media ha aumentado 1,5 grados en las tres últimas décadas; que el nivel del mar sube cuatro milímetros cada año --el doble que en la década de los ochenta--; o que las precipitaciones han descendido de forma notable, sobre todo en el sur de la península.

MAS TEMPERATURA El responsable del Ministerio de Medio Ambiente recordó que el último informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente prevé un aumento de la temperatura media de hasta 4 grados al final del siglo.

El secretario general para la Prevención del Cambio Climático aseguró, por último, que existen ya suficientes alternativas válidas a la energía nuclear.