Los sistemas de navegación GPS de los automóviles mantienen presente la época de la dictadura franquista en numerosas calles de Extremadura, como también de toda España. Mantienen los nombres del pasado, aunque al mismo tiempo, no obstante, reconocen también la denominación actual, algo que ocurre en un total de 42 vías extremeñas, y en más de 260 de toda España.

De esta forma, las calles de profesiones o que hoy rinden homenaje a escritores, poetas, pintores y feministas del siglo XIX y XX conviven todavía con los nombres franquistas que los precedieron. Así, las calles extremeñas de los Maestros o la calle Rafael Alberti son reconocidas también por los GPS como General Franco y Calvo Sotelo, respectivamente.

Y además del nombre de Francisco Franco o El generalísimo, que aparecen en muchas de las vías del callejero de la región, aún tienen también cabida en el GPS otros de sus "compañeros de batalla", como los generales, coroneles y capitanes Mola, Yagüe, Queipo de Llano, Varela, Cortés, Aranda.

Así lo revela un estudio elaborado por Tele Atlas, compañía especializada en cartografía digital y servicios de localización, que busca una especie de disculpa a esta situación asegurando que los sistemas de navegación "no entienden" de memoria histórica; y que insiste en que "se mantendrán en estos sistemas de navegación las denominaciones antiguas, en combinación con los nombres actuales, para facilitar la orientación a muchos ciudadanos". El estudio de Tele Atlas, realizado a partir de un sistema propio de gestión y detección de datos basado en más de 50.000 fuentes diversas y 200.000 actualizaciones cartográficas anuales, revela también que Extremadura, junto con Castilla-León, Castilla-La Mancha y Andalucía, son las comunidades autónomas que mantienen la mayor parte de calles rotulados todavía con nombres de la dictadura franquista; así como también que, dentro de la Comunidad extremeña, Bohonal de Ibor, Calzadilla y Escurial son los municipios que más vías con nombres franquistas registran.

Pero también muestra que no solo las calles extremeñas recuerdan en sus rótulos al franquismo, pues en prácticamente todas las comunidades los ciudadanos circulan por vías que, a pesar de su denominación actual, son reconocidas por los GPS con sus nombres de antaño. De esta forma, los madrileños pueden circular por el paseo de la Castellana sabiendo que lo están haciendo por la antigua avenida del Generalísimo, o los gallegos hacerlo por la calle del pintor Carlos Maside de Ourense sabiendo que están en la antigua calle General Mola...

El estudio de Tele Atlas prueba, en definitiva, que a pesar de la Ley de la Memoria Histórica y la modificación de los nombres franquistas de las calles, las denominaciones de antaño permanecerán, junto a las nuevas, en la memoria de los GPS "para facilitar su orientación a todos los ciudadanos, muchos de los cuales vivieron aquella época".