La tasa de incidencia de la gripe en Extremadura descendió la semana pasada hasta situarse en 63 casos por cada 100.000 habitantes, por debajo del umbral epidémico que este año estaba marcado en 88 casos, según los datos del sistema centinela. Los hospitales extremeños notificaron la pasada semana dos nuevos casos graves y eleva la cifra a 114 de los que 80 han recibido ya el alta. La cifra de fallecidos se mantiene en 19.