Camas clausuradas, menos operaciones y obreros en los pasillos. Es una escena frecuente en los hospitales durante los meses de verano que este año se vuelve a repetir. De las más de 3.000 camas instaladas en los 14 hospitales extremeños, casi un 20%, unas 600, no están operativas. «Durante la época estival se optimiza el número de camas activadas por la lógica disminución de la actividad quirúrgica y asistencial, pero existe un correcto funcionamiento de los hospitales con suficiente capacidad de respuesta ante cualquier eventualidad», explican desde la Dirección General de Asistencia Sanitaria del Servicio Extremeño de Salud (SES). «Más del 80% de las camas están operativas y, en todo caso, estas no desaparecen y si se necesitan están ahí para usarse».

Del total de las camas clausuradas, unas 400 se han cerrado, según el SES, por la «necesidad» de acometer obras de mejora y labores de mantenimiento en las plantas en las que se encuentran, de hecho actualmente se están realizando reformas en los hospitales de Cáceres, Plasencia y Don Benito.

Pero además hay alrededor de otras 200 camas que están vacías especialmente por la falta de facultativos especialistas, como cirujanos y anestesistas. Y es que hay profesionales médicos que el SES califica como «no sustituibles o de muy difícil sustitución» cuando llegan las vacaciones, lo que obliga a reducir la actividad quirúrgica programada y con esta, los ingresos hospitalarios.

Pero esta, asegura, no es la única causa determinante en la disminución de la actividad asistencial en verano. Hay pacientes con patologías no graves que están pendientes de una operación pero no quieren pasar por el quirófano durante las vacaciones estivales «bien por razones personales, bien por razones de conciliación con el periodo vacacional de sus hijos a cargo», explican. Y otro factor más: en verano también se reducen los ingresos hospitalarios por patologías de carácer infeccioso, «por epidemias típicas en los meses de invierno que conllevan además un mayor incremento de descompensación en pacientes crónicos», apuntan.

Sin embargo, con las abultadas listas de espera sanitarias (más de 127.500 pacientes), hay quienes opinan que no se debe bajar la guardia durante los meses de verano, porque las enfermedades no se van de vacaciones y porque son fechas en las que hay zonas de la región que incrementan su población. «Toda la asistencia programada que no se haga ahora y la que se genera estos meses incrementarán las listas», valora Pedro Hidalgo, presidente del Colegio de Médicos de Badajoz.

CONTRATOS DE CALIDAD / A su juicio, la disminución de la actividad asistencial no se debe a la falta para encontrar médicos sustitutos sino a la ausencia de contratos de calidad para que estos profesionales quieran quedarse en la región, tanto en su duración como en su remuneración. «No podemos tener médicos sentados en el banquillo para que operen solo durante el mes de agosto, porque un médico tarda once y doce años en formarse y no se va a quedar en su casa esperando que le llamen para trabajar un mes al año». Por eso, Hidalgo considera que tras la diminución de la actividad asistencial adolece una falta de planificación de los recursos humanos del SES y también de presupuesto.

«Las sustituciones de nuestros médicos no se hacen en julio y agosto, se tienen que hacer de septiembre a septiembre planificando los recursos. Y no se hace, pero todos los años ocurre lo mismo y volverá a pasar el próximo verano. Luego dirán que no tenemos médicos, pero ¿cómo los vamos a tener? ¿En el banquillo?», insiste Hidalgo.

«Es cierto que hay facultativos especialistas que son muy difíciles de sustituir, pero hay otros que no y no se les están ofreciendo contratos atractivos para que quieran quedarse aquí, se ofrece trabajo por un mes o simplemente contratos de guardias y optan por irse a otras comunidades donde se les contrata durante tres o seis meses», señala Emilia Montero, responsable del área de Sanidad de CSI-F.

El sindicato señala que hay profesionales que tienen que acumular el trabajo de sus compañeros ausentes. «No sabemos qué porcentaje de sustituciones está cubriendo el SES, pero lo que estamos viendo en los hospitales de la región es que no se está sustituyendo apenas y se está acumulando el trabajo en el personal que se queda», explica Montero. Así, denuncia una falta de previsión, ya que el personal sanitario está obligado a solicitar sus vacaciones en abril para poder planificar el periodo estival, «sin embargo, no se está haciendo». Para Montero la disminución de la actividad asistencial y la falta sustituciones de personal está motivada por un ahorro económico. Señala además que tampoco sería necesario acometer obras y labores de mantenimiento si los hospitales contaran con personal de mantenimiento todo el año.

En el sector de la enfermería, el presidente del sindicato Satse, Damián Cumbres, señala que este verano, como los anteriores, «no se cubren las necesidades reales que existen» y que muchos enfermeros se marchan a otras comunidades que ofrecen más contratos.

PLANIFICACION / «En verano la atención no va a faltar, pero queremos que sea la mejor y para que nuestros ciudadanos no solo estén bien atendidos sino que además tengan cubiertas sus necesidades con listas de espera razonables, hace falta planificación y eso conlleva una estructura presupuestaria», sostiene Hidalgo.

La administración sanitaria reconoce que la disminución de la actividad durante el verano afecta principalmente a las especialidades quirúrgicas, pero no a los quirófanos, ya que todos los que se ubican en los principales hospitales de la región «están disponibles». Además, destacan que durante el periodo estival se siguen realizando intervenciones por las tardes en varios hospitales extremeños «aunque con menor intensidad que durante el resto de año a causa de la disminución de la actividad programada», indica el SES.

Pero el verano no se nota solo en los hospitales. «En el medio urbano medio se salvan porque están las urgencias de los hospitales (que mantienen las plantillas íntegras), pero en el medio rural hay médicos que ahora ni siquieran pueden librar después de una guardia para seguir pasando la consulta de otro compañero. ¿En qué trabajo se permite eso?», lamenta el presidente del Colegio de Médicos de Badajoz.

Desde el SES señalan que todos los centros de salud permanecen abiertos durante el verano y destacan que se ha reforzado la actividad de urgencias en las zonas de mayor afluencia turística de la región, como el norte extremeño.