Frente al aumento de robos de cable de cobre en la región, el sector olivarero extremeño ha visto como en la última campaña los robos de aceitunas han caído a menos de la mitad con respecto a la de hace dos años. Así, si en la campaña 2007-2008 hubo 157 denuncias, lo que se tradujo en 280.174 kilos de aceitunas sustraídos, en la del 2009-2010 la cifra se rebajó a los 67 robos y a los 101.257 kilos. En lo va de temporada --se inició a principios de octubre-- se han puesto en conocimiento de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad 14 denuncias, por robos y hurtos de un total de 5.700 kilos de aceitunas.

Los datos los ofreció ayer la delegada del Gobierno, Carmen Pereira, tras mantener una reunión con representantes de las organizaciones agrarias, la Guardia Civil y la policía nacional, los subdelegados de Cáceres y Badajoz, y de la Consejería de Agricultura.

A pesar de que las estadísticas son halagüeñas, la delegada dijo que no se bajará la guardia y que se seguirá combatiendo este tipo de robos desde distintos frentes. Así se intensificarán la vigilancia por parte de la Guardia Civil, de uniforme y en equipos de paisano, en las 226.410 hectáreas de olivar; los controles al transporte, especialmente con Portugal; y las inspecciones a almazaras y puntos de venta.

Por su parte, las organizaciones profesionales agrarias pidieron a la Delegación del Gobierno en Extremadura medidas ante el "espectacular" aumento de robos en naves y cortijos.