La Junta de Extremadura destaca que, además de una "importante" aportación de presupuestos adicionales para la comunidad, el I Plan Integral de Empleo de la región ha supuesto "un importante avance cualitativo" en el desarrollo de las políticas activas. Ello ha permitido, según el Ejecutivo, complementariedad de las actuaciones que ya se venían realizando a través de los Planes Regionales de Empleo y las políticas activas de empleo transferidas por el Estado.

Además, ha propiciado innovación a través de medidas dirigidas a satisfacer las necesidades reales de determinados colectivos, de sectores productivos emergentes y de ámbitos territoriales concretos, atendiendo sus singularidades y dando respuesta a sus demandas.

De igual modo, la Junta subraya las medidas experimentales de empleo y formación, nuevas metodologías, nuevas formas de intervención en el mercado laboral, buenas prácticas que han podido ser transferidas a la política regional de empleo y formación.

Así, insiste en que el I Plan Integral de Empleo ha permitido desarrollar un nuevo modelo de gestión de las políticas activas de empleo, un modelo que ahora tiene "fiel reflejo" en la nueva estructura y las nuevas políticas activas de empleo desarrolladas por el Sexpe, orientadas a una actuación "integral" para satisfacer las necesidades "reales" de las personas, de las empresas, de los sectores productivos y de las singularidades de cada territorio.

El I Plan Integral de Empleo ha beneficiado a más de 40.000 extremeños, mejorando sus oportunidades de empleo, especialmente en colectivos como los jóvenes universitarios, los jóvenes entre 16 y 25 años tutelados por la Junta de Extremadura, colectivos con riesgo de exclusión social o la población femenina.

Se han diseñado actuaciones como los programas experimentales de empleo y formación denominados "Rompiendo Moldes", programas dirigidos a las zonas tabaqueras del norte de Cáceres o a la zona del eje Zafra- Villafranca de los Barros-Jerez de los Caballeros, programas en barrios marginales de ciudades como Badajoz, Cáceres, Plasencia o Mérida, "Programa Renacimiento", o programas de formación y empleo dirigidos a poner en valor el patrimonio histórico dentro del "Programa Patrimonio Crea Empleo".

También se han desarrollado programas en localidades rurales, en las que se han realizado acciones formativas de especialización en el sector agrario y en ocupaciones con potencial de crecimiento en otras actividades del medio rural, a través del "Programa TFOA".

Además ha contribuido al desarrollo de determinados sectores productivos de "especial interés" para la región, como el sector de la restauración y el turismo, facilitando formación especializada a profesionales del sector a través del "Programa de Agentes de Dinamización Turística"; o el sector agrario, proporcionando formación específica a trabajadores eventuales agrarios y ofreciéndoles oportunidades de recualificación profesional.

Finalmente, también ha contribuido según la Junta al desarrollo del sector asistencial y de servicios de ayuda a domicilio, con el "Proyecto Ley de Dependencia", formando profesionales para dar respuesta al potencial de creación de empleo previsto en este sector para los próximos años.