El presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, recibió en la mañana de ayer el alta de la Unidad Coronaria y fue trasladado a una cama de hospitalización convencional del Area de Cardiología del Hospital Clínico de San Carlos de Madrid, en donde ingresó el pasado lunes tras sufrir un infarto en el hotel en el que se encontraba alojado.

Dada la evolución del presidente extremeño, el equipo médico que le atiende podría darle el alta definitiva mañana viernes. El regreso a Extremadura se realizará en el vehículo oficial del presidente. Rodríguez Ibarra se desplazará a Mérida, donde permanecerá durante el periodo de recuperación establecido, aunque el seguimiento y la supervisión médica serán llevados a cabo por profesionales del Servicio Extremeño de Salud.

Tras su ingreso en planta, el dirigente extremeño se levantó y recibió algunas visitas en la habitación. Además de algunos diputados y senadores extremeños, Ibarra recibió la visita del presidente del Congreso, Manuel Marín, y a última hora de la tarde de ayer se esperaba la de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y el presidente de Aragón, Marcelino Iglesias.

DEJAR EL TABACO Fuentes cercanas al jefe del Ejecutivo extremeño han mostrado su satisfacción por cómo ha evolucionado y aseguran que, después de sufrir el infarto, el presidente está mentalizado en dejar el hábito del tabaco.

Según manifestó ayer la consejera portavoz, Dolores Pallero, Ibarra se encuentra "muy animado, bien y con muchísimas ganas de volver a Extremadura". Pallero expresó su satisfacción porque "todo va muy bien, evoluciona favorablemente, y si todo sigue igual, el presidente estará el viernes con todos nosotros en Extremadura".

En este sentido, incidió en que los médicos le han recomendado un periodo de reposo de unas cuatro semanas, tras lo que deberá incorporarse de forma paulatina a su actividad laboral, y aseguró que "la convalecencia la pasará en su casa". Pallero manifestó que, según los facultativos, la recuperación será tan favorable que podría correr una maratón, aunque es necesario que deje el tabaco.

De otro lado, la consejera indicó que en la actualidad se está en una situación similar a las vacaciones de verano del presidente y que la Ley de Gobierno establece que sea el vicepresidente de la Junta, Ignacio Sánchez Amor, el que desempeñe el cargo de presidente en funciones.

Recordó que sólo será un periodo de 3 o 4 semanas hasta que se incorpore a su actividad normal, y señaló que las actividades que tenía comprometidas Ibarra en este tiempo, "que eran muchísimas, pues intentaremos ir absorbiéndolas con absoluta normalidad, el resto de miembros del consejo de Gobierno, y el vicepresidente". Ante esta situación, Pallero quiso enviar a la sociedad extremeña un mensaje de "tranquilidad y normalidad en el funcionamiento ordinario y diario de la labor de la Junta de Extremadura".