La Junta de Extremadura contratará a 2.000 profesionales para atender a otras tantas personas de la región con graves problemas de alzheimer. El objetivo es que "esas abuelas activas puedan tener un cuidado en los momentos más difíciles de su vida, como reconocimiento y respiro para una familia que las quiere, pero que no están en condiciones ni es capaz de atenderlas". Así lo anunció ayer el presidente extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, durante el acto institucional celebrado en la Asamblea con motivo del Día Internacional de la Mujer, dedicado especialmente a las abuelas activas.

La contratación de personas para atender a quienes tienen graves problemas de dependencia es uno de los acuerdos gestados en el Consejo de Gobierno extraordinario de la pasada semana en Hervás, que en este caso se concreta en los enfermos de alzheimer. El presidente extremeño también recordó otra medida de este tipo: la construcción de viviendas adosadas para que vivan en hogares independientes personas que necesitan del cuidado mutuo, como pueden ser las personas mayores, y otros sectores que requieren ayudas sociales, como los inmigrantes o las mujeres maltratadas.

Ibarra, que centró su intervención en el papel que las abuelas juegan en la sociedad actual, destacó el "doble sacrificio" que realizan, primero para educar a sus hijos, y después para cuidar a sus nietos, con el objetivo de que sus propios hijos mejoren su vida familiar y laboral, a la que los abuelos renunciaron.

Sin embargo, indicó, muchos lazos familiares se rompieron hace años a causa de la negativa a levantar fábricas en Extremadura antes de la llegada de la democracia, lo que obligó a muchos extremeños a emigrar. Esa historia, dijo Rodríguez Ibarra, "sigue hoy", porque "hay gente que dice que no se instale una fábrica porque entonces dejaremos de ser pobres y perderemos las ayudas europeas".

En el acto celebrado ayer, también intervino el presidente de la Asamblea, Federico Suárez, quien abogó porque los poderes públicos insistan en generar medidas para lograr la igualdad de oportunidades.

MUCHO POR HACER En este sentido, la directora general del Instituto de la Mujer de Extremadura (Imex), Josefa Caraballo, señaló los avances de la mujer en la vida laboral debido, entre otras cosas, a la labor de la Administración regional, pero aclaró que deben seguir trabajando ya que "hay mucho por hacer".

El momento más emotivo lo pusieron Isabel Sánchez y Antonia Nieto, dos abuelas activas que explicaron su experiencia, primero en el cuidado de sus hijos y ahora, también trabajando en el de sus nietos, algo que "no es una carga, sino un regalo".