El presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, y el expresidente del Gobierno Felipe González comieron ayer juntos en un hotel de Trujillo, en lo que definieron como un encuentro habitual de "amigos". A la conclusión de la comida ninguno de los dos socialistas quiso hacer declaraciones por tratarse, según dijeron, de una visita estrictamente de carácter privado.

Poco antes de las cinco de la tarde Rodríguez Ibarra y González se despidieron del director del hotel y uno del otro, y después emprendieron su respectivo camino de regreso.

El primero en llegar, al filo de las dos de la tarde, fue el expresidente del Gobierno, que lo hizo en un vehículo todoterreno. Más tarde lo hizo Rodríguez Ibarra, pero la visita de los dos políticos, que vestían ropa informal, pasó desapercibida en la ciudad.