El movimiento pictórico Op art o Arte óptico nació en los años 50 en Estados Unidos. Un grupo de artistas que pretendía crear ilusiones ópticas en sus obras dio nombre a esta corriente, en la que se inscriben Victor Vasarely, Bridget Riley o Frank Stella, entre otros. Desde Estados Unidos se extendió a países como Francia, del que uno de sus cultivadores es André Welch. La obra de este artista se expone en el Museo de Cáceres. ´Suelo de la tierra´ recoge cuadros de este creador nacido en 1934. Tras apuntarse que su obra era parecida a la de Pollock, uno de los grandes artistas norteamericanos del expresionismo abstracto, Welch decidió cambiar de lenguaje y crear el suyo propio. Una tendencia que desde hace quince años ha derivado en el trabajo de puntos y rayas sobre una pintura base que actúa a modo de pantalla, "moviéndose según se mire la obra", en palabras del artista. "Mi técnica llega a convertirse en una obsesión, pero mi obra es lenta para que encuentre su propio ritmo". De hecho, los cuadros que se exponen en el museo cacereño ha tardado en pintarlos de dos meses a cuatro años. "El arte es libre y cada creador se expresa como quiere. Por ello, mi pintura está abierta a la interpretación: produce sensaciones, no un mensaje".