Guillermo Fernández Vara desvinculó ayer la subida de impuestos a las compañías eléctricas que se contempla en los presupuestos para 2010 del cambio del domicilio social de la central de Almaraz (CNA). "Hemos tomado esta decisión porque hemos creído que era la más viable; a lo mejor hubiera sido mejor no haber tenido que poner el impuesto", reflexionó, a la vez que aclaró que hay buena voluntad en las conversaciones por parte de los responsables de la CNA.