El informe policial remitido por la Guardia Civil de Toledo al juez de primera instancia e instrucción de Logrosán, Pedro Pablo Ruiz, no desvela las causas del accidente del Eurofighter , el prototipo español de avión de combate europeo, que se estrelló el 21 de noviembre en la finca Valdepuercas, situada en el término de Alía.
El magistrado aclaró, en declaraciones a EL PERIODICO EXTREMADURA, que en el atestado del accidente recibido hace escasos días, no se han incluido las razones del suceso que tuvo lugar en un paraje de difícil acceso de la Sierra de Altamira, dentro de la explotación cinegética propiedad del empresario siderúrgico José María de Aristrain.
El titular del juzgado está a la espera de recibir, por parte de la comisión de expertos que investiga el accidente, el informe definitivo sobre las causas del accidente. Pedro Pablo Ruiz señaló que no existe un plazo fijado para la entrega de este informe que, dijo, "dependerá de lo que los técnicos tarden en hacerlo".
Mientras tanto, sigue el mutismo alrededor del caso. Ayer un portavoz de la finca donde cayó el aparato no quiso confirmar ayer si los restos del avión siniestrado continúan siendo examinados en esa misma zona del término municipal de Alía, o ya han sido trasladados por miembros de la empresa EADS-CASA, división española de la compañía europea de aeronaútica y defensa, a su factoría de Getafe.
