El informe que determinará las demandas y necesidades hídricas de Extremadura ante un hipotético trasvase desde el pantano de Valdecañas hacia el Levante español tomará en consideración las consecuencias del cambio climático en la región, es decir, una disminución de las precipitaciones y un incremento de las temperaturas a lo largo de todo el siglo XXI.

Este informe será elaborado por el Consejo Asesor del Agua de Extremadura, que ayer vivió en Mérida la constitución formal de su comisión permanente, momento en el que empezó a trabajar en el estudio a pesar de que el trasvase "no está sobre la mesa" del Gobierno español, según recalcó nuevamente el consejero extremeño de Fomento, José Luis Quintana.

El objetivo del informe es analizar las aportaciones tanto del pantano de Valdecañas como del de Cedillo sobre las demandas actuales y futuras de agua, tanto para el abastecimiento humano como para la agricultura de la zona en los próximos 50 años. También se calcularán los posibles excedentes y la evolución de la calidad del agua, y determinará el volumen de agua que podría ser trasvasado, incluidos los "condicionantes y compensaciones" derivados del mismo, según recoge Europa Press.

Este estudio tendrá en cuenta los cambios en las condiciones climáticas que se esperan a lo largo del próximo siglo en el territorio español, como consecuencia del calentamiento global. Para ello, se aplicará un coeficiente aminorador sobre el cambio climático basado en dos series, la primera relativa a las aportaciones efectuadas desde 1949 a 1980, y la segunda desde esta fecha hasta el presente.

Los distintos escenarios que plantea la estrategia española contra el cambio climático hablan de un incremento anual de la temperatura de entre 5 y 8 grados centígrados a lo largo del siglo XXI. Además, en la mitad sur de la península las precipitaciones se reducirán un 40%.

Estas predicciones hacen pensar que el informe extremeño sobre el trasvase sea algo conservadoras, y más teniendo en cuenta que el estudio tendrá también en cuenta las posibilidades del mismo desde el punto de vista técnico, económico, ambiental y social de la zona de influencia del pantano cacereño.

La comisión la forman 12 miembros, y en ella está representada la Junta, las confederaciones hidrográficas, las comunidades de regantes, los municipios, las organizaciones agrarias, empresariales y sindicales, ecologistas y la universidad.