La Fundación Computación y Tecnologías Avanzadas de Extremadura (Computaex) ha presentado en la Internacional Conference on High Performance Computing & Simulation de la localidad austriaca de Innsbruck, una aplicación que brinda a los investigadores la posibilidad de recurrir a las ventajas que aporta la capacidad de cálculo de los supercomputadores sin requerir una formación y experiencia previas sobre programación.

Para el ingeniero del Centro Extremeño de Investigación, Innovación Tecnológica y Supercomputación (Cénits), Javier Corral, la aplicación desarrollada permite "traducir de forma automática el código de programación secuencial, que utilizan los equipos informáticos habituales, al código paralelo que se ejecuta en un supercomputador, permitiendo así aprovechar las ventajas que ofrecen estas infraestructuras". El desarrollo parte de un modelo en el que no solo se consideran las necesidades del investigador, sino también las necesidades de gestión de recursos y eficiencia energética a las que deben atenerse los centros de supercomputación. "Emplear la mayor cantidad de recursos posible no siempre se traduce en más rapidez en la obtención de resultados. En ocasiones solo se consigue malgastar potencia de cálculo y sobre todo energía, aspectos que actualmente deben ser tenidos muy en cuenta en cualquier centro de supercomputación". Aunque todavía se encuentra en fase de desarrollo, ya ha sido empleada con éxito en varias pruebas matemáticas.