La figura de José Villa, vicepresidente de la Institución Ferial de Extremadura (Feval) y persona propuesta por los socialistas para ocupar la dirección de la futura radiotelevisión regional, se ha convertido en el factor clave de una guerra de acusaciones iniciadas tras la ruptura de las negociaciones entre las dos formaciones para elegir al que será responsable de los citados medios de comunicación.

Desde Izquierda Unida denunciaron ayer que los dirigentes socialistas le ofrecieron el jueves la posibilidad de negociar otros cargos como la presidencia de la comisión de control parlamentario, la dirección de la radio y también de la televisión a cambio de que aceptaran a Villa como director general, "de que renunciáramos a tener a un director general independiente, ligado a los medios de comunicación, con capacidad de gestión y con interés por crear una televisión de calidad", matizó el líder de la coalición, Víctor Casco, que incidió en que IU "no está para repartirse los sillones".

Casco explicó que fue el PSOE quien abandonó las negociaciones tras la negativa de la coalición a aceptar el "único candidato posible" y recordó que IU ya dio el visto bueno a otras dos candidaturas presentadas por el Grupo Socialista --el periodista Pablo Sánchez y el presidente de la Academia de Yuste, Antonio Ventura--, tras lo que fueron retiradas por los socialistas, a quienes acusó de haber hecho un uso "ilegítimo y vergonzante" de estos nombres.

No obstante, Casco se mostró dispuesto a iniciar "desde cero" las conversaciones e instó al PSOE a tener "la suficiente capacidad para saber que lo importante es sacar adelante el nombramiento del director de la televisión y no el de Villa".

LLAMADA A LA REFLEXION Por su parte, el vicepresidente de la Junta, Ignacio Sánchez Amor, pidió ayer a la coalición que reflexione sobre su papel en las negociaciones, ya que, aseguró, no puede pretender, con tan sólo tres diputados, ser la fuerza política que nombre al director tras vetar sucesivamente las propuestas del PSOE.

Sánchez Amor recordó que IU aceptó en una primera negociación el perfil gerencial que debía tener la persona que ocupe este cargo, que tenía que ser alguien "no vinculado a partidos políticos y sin una vida pública anterior que suscitara suspicacias". En este sentido, destacó que Villa responde a ese perfil y sin embargo IU lo rechaza sin dar razones de validez o esgrimiendo argumentos que son falsos.

Por ello advirtió a IU que debe "entender que por principios democráticos no podemos llegar a un sistema en el cual sucesivos vetos la conviertan en la fuerza política que nombre al director". Si eso no se entiende, señaló, el Gobierno y el PSOE seguirán adelante con la creación de la televisión "superando también este obstáculo", con una fórmula que "pasará por ejercer la capacidad política que tenemos como Gobierno y como fuerza mayoritaria en el Parlamento".