La problemática en torno al menor, desde el acoso escolar a las bandas, o el incremento de los casos de maltrato de menores a sus mayores; y en el lado opuesto la utilización de menores para la comisión de actos delictivos o los abusos a niños, son temas que preocupan y mucho, tanto en Extremadura como en el resto de España.

Para hablar de menores ha estado en Cáceres Javier Urra, un navarro afincado en Madrid que fue el primer Defensor del Menor de España, del 96 al 2001, y para el que, desde muy joven, la protección de la infancia es su principal dedicación. Estudió Psicología y Pedagogía Terapéutica, y una oposición del Ministerio de Justicia le llevó a trabajar durante tres años a un centro de reforma para menores; y desde hace 20 años a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, en la sección de menores.

--El tema que le ha traído a Cáceres lo titula La juventud actual: claroscuros. ¿Cuáles son según usted los claroscuros de la juventud de hoy?

--Los claros, que son muy solidarios, comprometidos con el mundo, con gran sentido de la fidelidad de los amigos y, en general, bastante esperanzados y desde luego la juventud más preparada que hemos tenido en España. Entre los oscuros, que están perdiendo mucho lenguaje; también, en gran medida, el sentido de trascendencia de la vida; que tienen un acceso facilísimo a la droga y muchos caen; y que hay muchos cuyo principio filosófico es primero yo y después yo.

--¿Se detecta ahora un incremento de los delitos cometidos por menores?

--La verdad es que no. Además, lo que ha cambiado en los 20 años que yo llevo en la Fiscalía de Madrid es que ahora hay bastantes menos delitos cometidos por menores que antes, pero también que los que se cometen ahora son más graves, muchos más violentos.

--Cada vez hay más, al menos en la Fiscalía de Extremadura han aumentado los casos, comisión de delitos de maltrato en el ámbito familiar por parte de menores a padres, abuelos... ¿Se da en otras comunidades? ¿Cuál puede ser la causa?

--Es algo general. En cuanto a una de las principales causas, teniendo en cuenta que los niños maltratadores no nacen, se hacen, está el no saber los mayores decirles no a tiempo, no ponerles límites, permitirles que sean los reyes de la casa, unos tiranos.

--También están aumentando, hasta el punto de considerarse alarmante, los casos de acoso escolar. ¿Qué armas legales existen para acabar con ello?

--El único y fundamental arma que hay son los propios niños. Se está responsabilizando a los profesores, a las asociaciones de padres y madres, y son los chavales los que tienen que hacer frente a los acosadores poniéndose de parte de las víctimas, algo que en general no hacen porque les resulta más fácil ponerse del lado del chulo, del matón, para no convertirse en víctimas. Hay que hacer ver a los niños y jóvenes que ellos son ciudadanos de pleno derecho, pero también tienen deberes y responsabilidades.

--¿Qué opina sobre el cumplimiento efectivo de la pena de prisión cuando el menor alcanza la mayoría de edad?

--Creo que el gobierno hace bien en dar la opción, pero sólo como una opción para casos muy significados, donde se valore todo, donde hay un informe que así lo diga de los profesionales del centro donde el menor estaba antes... Si todos los considerandos nos llevan a decir que un chaval debe ir a la cárcel, que vaya, pero sólo como caso excepcional.

--Desde su punto de vista, ¿cuáles serían las reformas más necesarias y urgentes de la Ley del Menor teniendo en cuenta los años de vigencia?

--Explicar bien la ley a la sociedad, y a los menores dejarles claro que no son impunes, que quien la hace la paga. Dotar de más medios a las comunidades autónomas para centros, específicamente terapéuticos. Y también hace falta otra ley paralela que apoye a las víctimas, pues la que tenemos es la ley de responsabilidad penal del menor, pero haría falta otra de protección a las víctimas del menor.

--Teniendo en cuenta que las estadísticas judiciales constatan que la edad de los menores que cometen delitos es cada vez más baja, ¿sería necesario bajar la edad de aplicación de la Ley del Menor a los 12 años?

--En general no, pero para los casos de reiteración o para hechos muy graves sí la bajaría.

--¿Qué opinión le merece el que mientras que en los casos de mayores si los condenados se declaran insolventes la responsabilidad civil no la paga nadie, y en el de los menores la responsabilidad civil derivada de los delitos cometidos por éstos la pagan los padres?

--Me parece bien. Yo creo que los padres tenemos una gran responsabilidad en la educación de nuestros hijos y somos corresponsables de sus actos.