Las lluvias que han caído a lo largo de los últimos días en toda la región han generado numerosas situaciones cargadas de tensión.
Una de las más curiosas fue sin duda la que se generó en el Balneario de Valdastillas. Por la mañana, la Delegación del Gobierno en Extremadura informaba de que unas 200 personas habían quedado aisladas en este balnerario porque las lluvias habían "cortado las vías de acceso".
Sin embargo, Carlos Alcántara, director del centro, aclaraba poco después --y tras recibir numerosas llamadas de medios de comunicación de ámbito nacional-- que solo se había cortado uno de los accesos, por lo que los clientes podían salir por unas pistas forestales. "No salieron porque no quisieron", añadió, informa Faustino Martín.
Al mismo tiempo en Arroyo de San Serván se desbordaba el arroyo Tripero, anegando un campamento de temporeros rumanos. Los primeros vecinos de la zona descubrían la situación en torno a las 7 de la mañana y colaboraban en el rescate de entre 60 y 70 personas. Poco después se activaba el voluntariado local y los propios vecinos se organizaban --a través de llamamientos por la emisora municipal-- para reunir comida, mantas, colchones y ropa para atender a estos temporeros.
Sin embargo, en pocas horas la noticia corrió entre los rumanos asentados en la comarca y en torno a 200 temporeros de la zona se reunieron en Arroyo en busca de comida y ropa ante la indignación de los vecinos.
Recogida de setas
Susto también fue el que se llevaron cuatro vecinos de Santibáñez el Bajo y Navaconcejo, que el domingo, mientras recogían setas, quedaron atrapados ayer junto a un arroyo en Nava del Barco (Avila). Estos cuatro aficionados a la micología tuvieron que ser rescatados con una tirolina montada por una patrulla del Grupo de Montaña de El Barco. Durante la operación de rescate un agente sufrió diversas heridas.
Otra de las imágenes más espectaculares de la jornada tuvo lugar en la carretera que une Moraleja con Moheda de Gata. Y es que aunque la vía no tuvo que ser cortada el exceso de lluvia, acabó por reventar los desagües de la carretera, haciendo que el agua saltase sobre el asfalto.
Más problemas sufrió la línea férrea entre Fregenal de la Sierra y Huelva, afectada por la tormenta que azotó la Sierra de Aracena y los Picos de Aroche.
El temporal también atacó duramente a los juzgados y afectó en gran medida a la actividad del Palacio de Justicia de Mérida y del Juzgado de lo Social de Plasencia.
En la localidad placentina, además, la inundación de un transformador de Iberdrola provocó un apagón en la zona de Santa Ana que mantuvo a vecinos y hosteleros sin suministro durante unas cuatro horas la noche del domingo.
El corte afectó a varios bloques de viviendas y a tiendas, bares e incluso a Telepizza, que tuvo que anular pedidos y tirar a la basura masas ya estiradas, informa Raquel Rodríguez.
