En Miajadas no han pasado muchos apuros mientras llegaban los 140.000 euros que la Junta le debía. El alcalde de esta localidad, Juan Luis Isidro, asegura que el dinero siempre viene bien, pero tienen un remanente de tesorería de 800.000 euros "que supone un colchón bastante importante para poder afrontar estos retrasos y sobrevivir sin agobios financieros". Han podido adelantar los pagos a los trabajadores del plan de empleo Experiencia, así como a los de los pisos tutelados, que era la principal deuda, sin hacer mucho encaje de bolillos; por eso ahora ese dinero que ya habían gastado y ahora recuperan lo usarán para los proyectos que tienen en marcha. "El flujo de caja siempre es necesario y ahora, a primeros de año, es cuando peor estamos los ayuntamientos hasta que recibimos la liquidación de los impuestos en marzo".

¿Cuál es el secreto para mantener las cuentas tan saneadas que incluso se han permitido bajar impuestos? "Hemos hecho una buena contabilidad de costes, tenemos una central de compras que funciona muy bien, ahorramos en luz haciendo mejores... Se consigue pensando mucho y con la colaboración de los funcionarios".