El juzgado contencioso administrativo número 1 de Badajoz decidirá la semana que viene si levanta o mantiene el cierre cautelar de la mina de níquel denominada Aguablanca ordenado por el Ayuntamiento de Monesterio --porque presuntamente la planta se ha construido sin licencia de obra-- y avalado por una reciente sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx).

En este sentido, según confirmaron a este diario fuentes judiciales, el juzgado pacense ha emitido un auto en el que levanta el cierre de la obra de forma provisional una vez que la planta fue precintada por la Guardia Civil y la policía local la semana pasada. Así, ayer mismo se celebró una vista en Badajoz en la que estuvieron los representantes de las dos partes. Es decir, del ayuntamiento, que ordenó en su día el cierre, y de Río Narcea, promotora de la mina que llevó esta resolución a los tribunales.

Pese a todo hay que tener en cuenta que todos estos autos y recursos se refieren únicamente a la petición del cierre cautelar de la industria y, por lo tanto, no juzgan el fondo del asunto.