La financiación sanitaria sufre "un cierto déficit" en Extremadura que además se está "incrementando" y que también afecta a los recursos humanos. Así lo reconoció ayer la consejera de Sanidad y Dependencia, María Jesús Mejuto, tras reunirse con el ministro Bernat Soria en Madrid. Un encuentro que giró en torno a este déficit financiero y de recursos humanos --según precisó la consejera-- y que se enmarca en la ronda de contactos que el titular de esta cartera mantiene con los responsables sanitarios de las distintas comunidades autónomas.

En este sentido, Mejuto cifró entre 150 y 200 los médicos de atención primaria que necesita el sistema de salud extremeño y entre 40 y 50 los especialistas de distintas áreas con los que se pondría fin a las carencias.

UNIDAD ENTRE AUTONOMIAS La Sanidad absorbe el 30% del presupuesto total de Extremadura, que se destina principalmente al pago del personal sanitario y al gasto farmacéutico. Por ello, Mejuto cree que en las negociaciones para la renovación del modelo de la financiación autonómica se debe tener en cuenta el gasto en la sanidad. A su juicio, los consejeros responsables de este área tienen que hacer aportaciones y facilitar la información, las necesidades y el gasto real, ya que el asunto "compete a toda la población". Los consejeros de sanidad no deben participar directamente en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, opina, pero sí informar a los respectivos presidentes autonómicos y a las consejerías de Hacienda y al Ministerio. Además, propone que en el Consejo Interterritorial los responsables autonómicos deberán fijar criterios, pautas, políticas y estrategias comunes para abordar la cuestión.

La carencia de profesionales sanitarios afecta a todas las comunidades, por lo que la consejera propone que cada autonomía valore las necesidades reales de personal "con la idea de plasmar esta propuesta en el Consejo Interterritorial". "Esta es una política que se tiene que hacer de manera conjunta --añade-- para determinar la necesidad de profesionales que existe" y una vez cuantificada en toda España, elevar la propuesta al Ministerio de Ciencia e Innovación "de las plazas que se deben crear en las facultades de Medicina para abastecer la demanda necesaria en la diferentes comunidades".

DISPERSION REGIONAL Mejuto también recordó que el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, se ha comprometido a que la sanidad sea similar para los ciudadanos en cualquier parte del territorio, lo que implica un aumento del gasto.

Así, asegura que "la situación real" de Extremadura es que la demanda sanitaria ha aumentado por el crecimiento de la población, la dispersión y la extensión geográfica de la región lo que conlleva un despliegue de medios para atender a los ciudadanos y "llevar la asistencia allí donde se encuentran".

De hecho, Mejuto explicó que en Atención Primaria los puestos "titulares" están cubiertos, "el problema está en los Puntos de Atención Continuada que requieren mayor número de profesionales y que parte del personal que los atiende opta al MIR y se marchan para realizar una especialización".

Respecto a las carencias de médicos especialistas, la consejera insiste en que estas fluctúan. De hecho, indicó que el año pasado faltaban principalmente anestesistas pero ahora las especialidades con más problemas en la región son cardiología, ginecología, traumatología, neurocirugía, urología, dermatología o pediatría. No obstante, confía en que algunas de esas plazas se cubrirán tras la celebración de las últimas oposiciones.

El personal sanitario extremeño asciende a 16.000 personas, de las que 3.700 son médicos. El déficit, según la consejera, asciende a unos 250 médicos --de entre 150 y 200 médicos de atención primaria y de medio centenar de especialistas--.

En la entrevista con Bernat Soria, la consejera extremeña también le comunicó al ministro la "rigidez y dificultad" para homologar los títulos que tienen los médicos especialistas extranjeros, especialmente de Centroeuropa y Sudamérica.