La estrategia del Gobierno extremeño sobre ferrocarriles pasa a una segunda fase. Si en un principio el objetivo era Madrid, desarrollar el máximo de actuaciones para que el trazado de alta velocidad en territorio extremeño estuviera listo antes de que concluya 2015, ahora ha puesto el foco en el país vecino, hacer ver a Lisboa que urge el trazado de Sines a Badajoz, el famoso Eje16, aprovechando precisamente eso: que el camino hasta Madrid está listo y preparado para transportar mercancías en uno y otro sentido con una línea altamente competitiva.

Así se puso de manifiesto en el Foro Empresarial Ibérico desarrollado en Badajoz el mes pasado en presencia de 270 empresarios de uno y otro lado de la raya, así como autoridades logísticas lusas y del Puerto de Sines. El consejero de Fomento extremeño, Víctor del Moral, ha señalado que la parte española de alta velocidad ha experimentado un amplio avance. El gobierno lleva ejecutados 783 millones de euros, a los que este año se sumarán otros 175 millones. Además, en los últimos 12 meses se han adjudicado contratos por valor de otros 600 millones para obras en traviesas y balastos entre Badajoz y Plasencia, necesarios para que ruede un TAP (tren de altas prestaciones) hasta tanto en cuanto llegue la electrificación de la vía y pueda hacerlo un AVE. Si se suman todas las cuantías se alcanzan los 1.550 millones de euros, y "si esto no es suficiente para convencer a Portugal de que la conexión entre Badajoz y Sines tiene futuro, es que los ibéricos no sabemos hacer bien las cosas", dijo.

Y parece que la táctica de la Junta ha calado en Portugal porque el pasado jueves el Gobierno luso anunció las inversiones en la mejora de las conexiones ferroviarias con España a partir de 2015, año en que comenzarán las obras en suelo portugués de la línea de altas prestaciones Madrid-Lisboa que prevé terminar en 2019, según informó a la agencia Efe el secretario de Estado de Infraestructuras, Transportes y Comunicaciones, Sérgio Silva Monteiro, quien precisó también que el recorrido entre las dos capitales ibéricas incluirá por lo menos una parada en el interior de Portugal, que se suma a la ya prevista en Extremadura. De esta forma, la conexión Madrid-Lisboa será de alta velocidad (AVE) en la parte española --con capacidad de circular a más de 300 kilómetros por hora--- y de altas prestaciones en el lado portugués ---con un máximo de 220 kilómetros por hora--, aunque no será necesario cambiar de tren y los sistemas serán totalmente interoperables. Esta línea será construida en ancho de vía europeo y permitirá el paso tanto de trenes de pasajeros como de mercancías.

Monteiro apuntó la existencia de partidas en los presupuestos de su país para avanzar en el tramo entre Sines y Caia para después proseguir con el tramo que une con Lisboa. Esta es la solución acordada por ambos países después de que el Gobierno portugués decidiera en 2012 cancelar el proyecto del AVE Madrid-Lisboa por su elevado coste.

HOY POR HOY, el 75% del transporte de mercancías entre ambos países se hace por carretera, cambiar esta tendencia es voluntad de Lisboa y Madrid.

El presidente de REFER, la Red Ferroviaria Nacional de Portugal, ha declarado recientemente al diario lisboeta 'Publico' que el trazado de Lisboa hasta Evora deberá registrar ciertas mejoras, si bien el comprendido entre Sines y Gr ndola y el situado entre Evora a Elvas tendrán que ser totalmente nuevos. Rui Loureiro ha declarado que estas actuaciones podrían empezar en 2016 y acabar en 2020.

La idea es reducir los tiempos de transporte desde Sines a Badajoz a la mitad, invirtiendo del orden de los 1.000 millones de euros. Sin embargo, tanto autoridades logísticas del país, como también del Puerto de Sines, creen necesaria una mayor urgencia, a lo que ahora también se suma el Gobierno de Extremadura, a fin de darle continuidad a la infraestructura del AVE español que se espera pueda estar concluida a finales del 2015.