La Bajada de la Virgen de la Montaña, patrona de Cáceres, cuenta con un destacado valor cultural, por tratarse de una celebración religiosa con gran tradición y arraigo en la ciudad. Se celebra el día 25 de abril y consiste en un recorrido en procesión desde su santuario hasta la Concatedral de Santa María.

Tanto en la explanada del santuario como en el recorrido y en su recibimiento en Fuente Concejo, en los aledaños del casco histórico, donde es recibida por parte de las autoridades civiles, religiosas y militares, participan miles de cacereños, quedando así patente el gran fervor que esta imagen tiene en la ciudad. A lo largo del recorrido, las calles están engalanadas y los asistentes lanzan flores para recibir a su patrona.

Para su designación se ha tenido en cuenta la originalidad de la celebración, en concreto el recorrido que la imagen realiza, sobre todo a su llegada a la ciudad, cuando se adentra en el casco histórico hasta la Concatedral de Santa María, por un enclave declarado Patrimonio de la Humanidad.

Se ha valorado la originalidad del cambio diario de manto de la imagen. En este sentido, existe una tradición según la cual los fieles que acuden al templo a visitarla durante el novenario han de averiguar previamente el color de dicho manto, algo que resulta bastante curioso y es conocido en la ciudad