La Junta de Extremadura duplicará hasta los tres millones de euros anuales su asignación a la Iglesia católica extremeña para la conservación y recuperación de su patrimonio eclesiástico en la comunidad autónoma, al amparo del acuerdo de la Comisión Mixta entre la Junta y la Iglesia Católica que se reunió ayer en Mérida por primera vez y fue presidida por la consejera de Cultura y Turismo, Leonor Flores, y el arzobispo de Mérida-Badajoz, Santiago García Aracil.

Una reunión que permite la renovación del convenio que mantienen desde hace 20 años y que actualiza las partidas destinadas a la Iglesia por la Administración regional hasta alcanzar los tres millones de euros anuales, el doble de la financiación dada hasta ahora.

No obstante, los términos del convenio deberán ser revisados por una subcomisión técnica, que se reunirá la próxima semana, la cual elaborará también un plan de accesibilidad a los edificios eclesiásticos y seleccionará, de acuerdo con las demandas presentadas por los ayuntamientos y en función de criterios técnicos y patrimoniales, las obras de recuperación del patrimonio de la Iglesia, como las ermitas o los conventos o cualquier otro espacio para que, acometidas las oportunas rehabilitaciones, se acuerde el horario de visitas de los edificios.

La partida anual de tres millones de euros se destinará, además de a estas intervenciones, a atender otras de carácter urgente para su reparación en 24 horas, como ejemplo, la consejera señaló la rehabilitación de la ermita de Villanueva de la Vera, cuyo techado quedó destruido recientemente por las lluvias.

La decisión que toma la Junta de Extremadura para ampliar su financiación a la Iglesia católica es debida a que "no se trata solo de recuperación del patrimonio, sino también de revitalizar zonas", explicó Flores, y subrayó que cada intervención "por pequeña que sea" requiere mano de obra, por lo que también "es muy importante esta visión social". Por su lado, Santiago García Aracil, arzobispo de Mérida-Badajoz, resaltó la "eficacia" de la reunión que ha servido para reanudar una etapa de relaciones con dos responsables nuevos al frente y añadió que "la novedad exige renovación, aunque también hay algo que se mantiene: el buen entendimiento".