El Ministerio del Interior y la Junta de Extremadura firmaron ayer dos convenios para realizar mejoras en medio centenar de cuarteles de la Guardia Civil en la región y para que los agentes de este cuerpo ayuden al Ejecutivo autonómico en la lucha contra la siniestralidad laboral.
Según explicaron el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el presidente extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, el primero de estos acuerdos supondrá una inversión de cinco millones de euros en mejorar las casas cuarteles. Más de la mitad de esa inversión --concretamente el 57%-- corresponderá al Gobierno central y el resto a la Junta. Con esta medida se reformarán un total de 50 instalaciones, que serán elegidas de forma consensuada por las administraciones.
El segundo convenio contempla que la Guardia Civil colabore en la detección de situaciones de riesgo para los trabajadores, centrándose especialmente en el sector de la construcción, y lo comunique de inmediato a las autoridades de la Junta.
FORMACION Para ello, según detalló Juan Carlos Rodríguez Ibarra, su Ejecutivo se encargará de formar a los agentes de materia de prevención de riesgos laborales y facilitará a este cuerpo armado los equipos informáticos y fotográficos para que la comunicación de las infracciones sea ágil y organizada.
Por su parte, Alfredo Pérez Rubalcaba señaló que esta firma supone un "buen ejercicio de responsabilidad compartida", dado que la Junta contribuirá a la financiación de las obras de los acuartelamientos --aunque no es su competencia-- y, por su parte, la Guardia Civil colaborará en la detección de obras donde se pueda infringir la ley sobre seguridad laboral, labor que no puede abarcar el Gobierno regional.
