La Consejería de Hacienda y Presupuesto criticó ayer el estudio del Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF), que señala que los ciudadanos extremeños soportan una mayor presión fiscal que los de otras comunidades, ya que, según afirma, esta conclusión es una "falacia".

Según el informe, una familia en la que los dos cónyuges trabajan y perciben salarios en torno a los 19.000 euros anuales, que tienen dos hijos pequeños, gastos de guardería y un crédito hipotecario, paga menos IRPF en caso de que vivan en Madrid y más si viven en Extremadura.

Sin embargo, la Junta asegura que la presión fiscal no se mide en relación únicamente a un impuesto concreto (IRPF), y mucho menos, como hace el estudio, en relación a unas concretas deducciones autonómicas -por nacimiento y cuidado de hijos y por guardería- que unas regiones regulan y otras no.

Según indica, para calcular la supuesta presión fiscal se investiga un caso concreto al que aplicar determinadas deducciones y se ha generalizado como "familia tipo", al tiempo que recuerda que ninguna CC.AA ha ejercido sus competencias para modificar las tarifas en el IRPF.