El Gobierno extremeño propuso ayer al Ministerio de Fomento una inversión de 70 millones de euros, cofinanciada al 50% entre ambas partes, ante la "grave situación de deterioro" en la que se encuentra la red ferroviaria en Extremadura, según explicó ayer la consejera de Fomento, María Antonia Trujillo, que desglosó los proyectos más importantes que su departamento desarrollará en la presente legislatura.

Trujillo argumentó que en el último año sólo se ha invertido en la línea Badajoz-Aljucén (Badajoz), que la velocidad media de los trenes es de entre 60 y 70 kilómetros a la hora, que todos los tramos de los 839 kilómetros de vía son de vía única y no están electrificados, y que hay más de 300 pasos a nivel. Por ello, reiteró, "se necesita la modernización urgente del sistema antes de que sea irrecuperable", por la situación de "abandono" que tiene la infraestructura ferroviaria en la región, algo de lo que el PP también culpó a la gestión socialista en el Gobierno de España.

La titular de Fomento insistió en que esas inversiones son necesarias y urgentes porque el ferrocarril "es un motor económico", y para que "se reduzcan las distancias que separan a los extremeños", comentó.

VIVIENDA Y TRANSPORTE

Al margen de las actuaciones en la red ferroviaria, Trujillo anunció otras medidas que Fomento pretende llevar a cabo en los próximos años. Entre ellas destaca la apuesta por la vivienda protegida, con la puesta en marcha de un plan especial de vivienda, por la que la Junta construirá casas de menos de 60.000 euros para aquellas rentas que no superen 3,5 veces el salario mínimo interprofesional, y con un IVA "muy reducido".

Por otro lado, la Junta creará estaciones multimodales para el tráfico de viajeros en el entorno de las principales ciudades extremeñas, ubicando áreas para facilitar combinaciones de transporte urbano, interurbano y ferroviario a los viajeros.

Además, prevé poner en marcha un puerto seco para canalizar el transporte de mercancías; desarrollar una normativa sobre el ciclo integral del agua; acabar las autovías regionales, y negociar vuelos a Barcelona.