La Junta de Extremadura reclamó ayer al Gobierno central más medios económicos y humanos en la lucha contra la violencia de género, especialmente más dotaciones policiales y una mejor formación de los agentes ante el quebrantamiento de las órdenes de protección. «En Badajoz hay un solo policía para 80 mujeres con orden de alejamiento», lamentó la directora del Instituto de la Mujer (Imex), Elisa Barrientos, que incidió en que estas «sí sirven» pero «tienen que ir acompañadas de la respuesta judicial que la propia ley establece».

En rueda de prensa, la responsable del Imex y la consejera de Hacienda y Administración Pública, Pilar Blanco-Morales, exigieron también un Pacto de Estado contra esta lacra, pues la cifra de 16 mujeres asesinadas a manos de sus parejas o exparejas en lo que va de año «es inadmisible». Blanco-Morales criticó la «inacción» del Gobierno en este ámbito y exigió al Ejecutivo de Mariano Rajoy que «asuma sus responsabilidades» liderando la puesta en marcha de nuevas acciones que impliquen a toda la sociedad y que cuenten con los recursos suficientes. «Hay que acabar con los recortes y es más necesario que nunca un Pacto de Estado», dijo Blanco-Morales, que cfiró en un 26% el «brutal recorte» aplicado en este ámbito.

Estas declaraciones se producen después de que el pasado jueves el Gobierno anunciara la creación de dos órganos permanentes contra la violencia machista, órganos que entre otras funciones revisarán los fondos asignados en esta materia a ayuntamientos, comunidades y ministerios; evaluarán las órdenes de protección y reforzarán las medidas dirigidas a los niños. Además, se da la circunstancia de que el pasado miércoles murió en Villanueva del Fresno una mujer de 91 años después de que su marido, de 92, le causara días antes heridas en el cuello con un arma blanca.

Por todo ello, la Delegación del Gobierno en Extremadura tildó de «desafortunadas e irresponsables» las manifestaciones de la Junta, a quien acusó de «aprovecharse de la muerte de una mujer por violencia de género en Extremadura para hacer política partidista». «Una vez más, el Gobierno reitera que la lucha contra la violencia de género es una cuestión de Estado y que toda la sociedad debe implicarse en romper el silencio», detalló la Delegación, que entre otras medidas citó la creación de estos órganos o el acuerdo al que PP y PSOE llegaron en el Congreso en noviembre para hacer frente común contra la violencia de género y mostrar su apoyo a la mujeres.