La Junta de Extremadura ya ha abierto este año --hasta el 22 de octubre-- 295 expedientes administrativos contra locales que han incumplido el horario de cierre. La mayoría pertenecen a negocios de la provincia de Cáceres (156), mientras que el resto (149) corresponden a municipios pacenses. Esto supone que, de seguir así, las cifras en diciembre podrían ser similares a las del 2006, cuando se incoaron 358 causas por este tipo de infracciones (150 en Badajoz y 208 en Cáceres).

El nivel de cumplimiento de la normativa tampoco es claro. En la Asociación de Afectados por el Ruido aseguran que la legislación "no se respeta en ninguna localidad, en absoluto", mientras que en la Federación de Municipios (Fempex) y la Confederación del Turismo reconocen que hay diferencias en el cumplimiento. "En los municipios grandes es más difícil que en los pequeños", dicen.

El incumplimiento del horario de apertura y cierre de establecimientos públicos contituye una infracción leve sancionada con multas de hasta 300 euros. Tres sanciones leves suponen una grave y el castigo se puede elevar hasta los 30.000 euros.