La Junta de Extremadura efectuó entre 5.000 y 6.000 visitas informativas a los establecimientos hosteleros de más de cien metros cuadrados que, según la ley del tabaco, desde el 1 de septiembre están obligados a contar con una separación física entre la zona de fumadores y no fumadores, si optan por permitir este hábito. Las visitas, realizadas entre el 1 de septiembre y el 4 de octubre, demuestran un "altísimo cumplimiento" de la ley, según el director general de Salud Comunitaria, Pedro García Ramos, quien destacó a Efe la tramitación de 15 denuncias --10 en hostelería y 5 en hoteles, y paradores--.

El objetivo de estas inspecciones se limita a informar y no sancionar, pero, en cumplimiento de la ley, se abrieron expedientes por aquellas denuncias interpuestas por los ciudadanos.

García Ramos explicó que dentro de un "periodo razonable", que no determinó, volverán a visitar los mismos locales, para comprobar si cumplen con la normativa.

La Junta desconoce el número de establecimientos de más de cien metros que han acometido la separación física, ya que no tienen la obligación de comunicarlo.

Las 30 denuncias registradas en los últimos meses, en todo tipo de espacios, se han dado en un hospital, dos multitiendas, un polideportivo, dos empresas privadas, un centro ocio, una tienda de comestibles y un tren, entre otras. Una de ellas fue presentada por un pasajero contra la compañía aérea Air Nostrum, ya que un viajero fumó en pleno vuelo con permiso del comandante de la nave.

Denuncias como ésta, junto al hecho de que casi el cien por cien de las empresas, por ejemplo, cumplan con la prohibición de fumar, reflejan una "conciencia colectiva diferente", resaltó García Ramos. La Junta no dispone de datos propios sobre los índices de nicotina en instituciones y empresas.