El delegado del Gobierno en Extremadura, Germán López Iglesias, ha anunciado esta mañana en Mérida que la Guardia Civil, dentro de la Operación Lithium, detuvo a un vecino de Sevilla de 39 años de edad, y a dos vecinos de la localidad cacereña de Miajadas, ambos de 29 años, como presuntos autores de los robos que se estaban produciendo en repetidores de telefonía en municipios extremeños.

Según ha explicado López Iglesias, estos robos se llevaron a cabo en su mayoría sin forzar los accesos a las estaciones, apoderándose de más de 300 baterías con un valor aproximado de unos 150.000 euros. Además del cable del interior de las instalaciones.

Así fue como el Equipo de Delincuencia Organizada de la Comandancia de la Guardia Civil de Badajoz y el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Villanueva de la Serena pusieron en marcha la primera fase de la Operación Lithium, con la que pudieron averiguar cómo dos trabajadores de una empresa de mantenimiento de las instalaciones que tenía contratada la compañía de telefonía aprovecharon sus desplazamientos a dichas estaciones para sustraer las baterías del interior.

Además de las baterías, se le intervinieron llaves maestras de las instalaciones y las herramientas utilizadas en los robos: radiales, palanquetas y llaves de mano, entre otros objetos.

Tras su detención, análisis de los objetos sustraídos y desarrollo de la investigación, al ahora detenido se le imputó la comisión de 38 robos en diferentes estaciones repartidas por la región extremeña.

La Guardia Civil continúa con la investigación, con las sospechas de que el detenido pudiera estar relacionado en la comisión de otros robos perpetrados en repetidores en Extremadura y Andalucía.

Las diligencias junto con las detenciones son puestas a disposición de los Juzgados de Instrucción de Zafra y Badajoz.