El estudio de la alumna de la Universidad de Extremadura (Uex), Guadalupe Fernández Corcho, sobre neuromarketing desvela la importancia de esta tecnología para desarrollar campañas publicitarias más eficaces.
La autora de la investigación, licenciada en Económicas y Empresariales, aclara que "el 'neuromarketing' surge para explicar el comportamiento del consumidor con ayuda de técnicas científicas".
Esta novedosa disciplina permite a las empresas "comprender la conducta" del consumidor y así elaborar "estrategias de marketing" para ofrecerle "lo que realmente quiere, como realmente le gusta, y conseguir, en definitiva, que escoja una determinada marca".
Las técnicas utilizadas se enmarcan en el campo de la neurociencia y van desde el registro de la actividad cerebral hasta el seguimiento ocular. También permiten analizar el ritmo cardíaco u observar cómo reaccionan los músculos ante un anuncio.
El coste de un servicio de neuromarketing es "muy elevado" y "pocas" empresas pueden permitirse contratarlo para diseñar sus campañas. Actualmente hay tres compañías en España que se dedican a investigar las emociones del consumidor.
"Esta novedosa ciencia te ofrece información, pero no sirve para leer el pensamiento. Da respuesta a qué áreas del cerebro se activan y tú tienes que interpretarlas" aclara la experta.
Según la autora, el marketing tradicional y el neuromarketing son "disciplinas complementarias", ya que "su unión da como resultado productos, servicios o campañas publicitarias más eficaces".
Tras realizar encuestas a un total de 70 empresas extremeñas, los resultados indican que "el tejido empresarial extremeño se muestra muy alejado del fenómeno del neuromarketing".
"La mayoría de las empresas (65,7%) no conoce su existencia, y si la conocen no disponen de información rigurosa y completa al respecto" y añade que "el 85,5% de las compañías tampoco conocía a ninguna empresa que hubiese utilizado alguna vez esta técnica".
La autora hace en que la empresa extremeña, en general, "no contempla la posibilidad de incorporar este tipo de tecnologías a su actividad futura", un hecho que es "comprensible" si se tiene en cuenta que el marketing es un "elemento prescindible en la gestión empresarial".
Fernández Corcho lamenta que "son pocas" las empresas que cuentan en su plantilla con algún experto para este fin y señala que la región "no dispone de un tejido empresarial cuyas condiciones favorezcan la implantación o uso del neuromarketing".
"Para que se modificase esta realidad es necesario un cambio de cultura en la gestión empresarial, en la que los servicios de marketing se contemplen como una herramienta competitiva fundamental, capaz de determinar el éxito o fracaso de una organización", concluye.
