Hombre, con estudios secundarios y nivel de renta bajo. Este es el perfil del nuevo empresario extremeño, según refleja un estudio elaborado por los profesores de la Universidad de Extremadura (Uex), Ricardo Hernández Mogollón y Carlos Díaz Casero, en el que se asegura que, por el contrario, el inversor informal, es decir, el que pone dinero en la empresa de otro, es fundamentalmente mujer, que trabaja, con nivel de estudios diverso, renta baja, una relación familiar con la persona a la que ayuda a iniciar la empresa y una aportación media de 8.800 euros.

El primer informe Global Entrepreneurship Monitor sobre Extremadura, incluido en un proyecto mundial de investigación iniciado en 1997 por el Babson College de Estados Unidos y la London Business School del Reino Unido, sostiene que la oportunidad es la clave a la hora de crear una empresa en la región, ya que las circunstancias o la falta de alternativas para desarrollar una carrera profesional han llevado a los emprendedores a dejar a un lado factores tan importantes como la necesidad.

Inversiones informales

En cuanto a este tipo de inversiones informales, en Extremadura tienen un carácter femenino, aunque es todavía un fenómeno que no está desarrollado como tal en la región al nivel de los países europeos. No obstante, el 2,75% de la población entre 18 y 64 años, es decir, unas 17.597 personas, actuaron como tales en la comunidad entre el año 2000 y el 2003.

El estudio, recogido por Efe, no es muy optimista en cuanto a las habilidades y conocimientos para poner en marcha un negocio, ya que los considera insuficientes en todos los aspectos e indica que la situación de la región en este apartado no es buena en comparación con la media nacional.

La mayoría de estos negocios, aseguran los dos profesores de la Uex, sólo esperan crear entre uno y cinco empleos, aunque las empresas ya consolidadas son más innovadoras que las de otras regiones.

También está por debajo de la media nacional la motivación para crear un negocio. La sociedad extremeña, creen los autores, no considera que ser empresario sea una forma muy deseada de desarrollar una carrera profesional.