La consejera de Cultura e Igualdad, Leire Iglesias, aseguró ayer que la creación de la consejería, fruto de la última remodelación del Gobierno extremeño, «no supone volver a empezar», no quita transversalidad a la política del Ejecutivo ni resta compromiso por parte del presidente Guillermo Fernández Vara. Iglesias hizo estas manifestaciones en su comparecencia en la comisión de la Asamblea, a petición propia, para explicar las líneas de acción hasta final de legislatura, en la que quiso destacar que la creación de este departamento, cuyas competencias dependían de Fernández Vara, «no es una moción de censura a sí mismo» como ha indicado el PP.

Recordó que la nueva consejería agrupa Cultura, Igualdad y Deportes, además de ser la competente en materia LGTBi y Memoria Histórica.

Iglesias explicó que en los dos primeros años la Junta se ha tenido que dedicar a «recuperar estructuras» tras los recortes del PP «y ahora hay que dar un segundo impulso en contenidos», que concretó con leyes como la del Deporte, Artes Escénicas, Prevención del Consumo del Alcohol por Menores o de Mecenazgo o Memoria Histórica. La consejera, que reiteró en varias ocasiones su oferta de diálogo a la oposición, indicó que quedan 19 meses de legislatura para afianzar la apuesta por las redes culturales, de igualdad y deportivas «que son marcas» de Extremadura.

Entre sus principales objetivos expresó su compromiso para que antes de final de año se tramite el Plan de Igualdad 2017-2020.