El avance de la lengua azul en Extremadura, con un posible foco en el norte de la provincia de Cáceres, ha generado las primeras críticas de los ganaderos hacia la Administración regional. En este caso se trata de cerca de medio centenar de propietarios de explotaciones ganaderas del Valle del Alagón que reclaman más ayuda e información a la Junta de Extremadura ante la oleada de muertes que están sufriendo en sus rebaños de ovejas con síntomas similares a los de esta enfermedad.

Según señala el veterinario que está atendiendo los casos en la zona de Coria, Angel Montero, hay más de 40 explotaciones que, a la espera de que el laboratorio de la localidad madrileña de Algete confirme la causa de las muertes, podrían estar afectadas por este nuevo foco de la enfermedad en la región. Estas fincas se encuentran en los términos municipales de Casas de Don Gómez y Casillas de Coria --donde se detectaron los primeros casos a finales de septiembre--, Torrejoncillo, Calzadilla, Casas de Don Gómez, Portaje, Huélaga y Coria.

"La administración debería informarnos más", lamenta Pedro Sánchez, uno de los 15 ganaderos de Casillas de Coria cuyo ganado se encuentra afectado por el posible brote. El ya ha perdido ocho ovejas y otras 20 presentan los síntomas. Peor le han ido las cosas a su vecino Adrián Blanco, que asegura que 60 de sus ovejas han perecido por este motivo.

RETRASO EN LAS PRUEBAS De momento cunde la impaciencia y el pesimismo. Montero, que aún no se atreve a hablar de cifras, afirma que hace más de dos semanas que enviaron las pruebas y aún no tienen noticias sobre los resultados. "Ya deberían conocerse", apunta. Los ganaderos afectados, por su parte, muestran cautela, pero aseguran que si la situación sigue así el sector del ovino en la zona podría irse "al traste".

Este diario solicitó ayer a la Junta de Extremadura, sin obtener respuesta, los datos sobre el número de cabezas y explotaciones que se maneja podrían estar afectadas por la lengua azul y si los laboratorios han confirmado los primeros casos. De esta forma, las últimas cifras disponibles son las que facilitó el pasado lunes la Consejería de Agricultura en un encuentro con ganaderos en Monesterio: más de 2.700 ejemplares muertos con los síntomas de la enfermedad en 342 explotaciones del sur y suroeste de la provincia de Badajoz.

Por otra parte, el lunes se celebra en Madrid la Conferencia Sectorial de Agricultura, en la que se estudiarán nuevas ayudas para los ganaderos afectados y medidas para hacer frente a la expansión de la enfermedad.