Cuarenta y dos litros por metro cuadrado es el volumen que ha alcanzado el agua de la lluvia caída en Aldeanueva de la Vera, entre las doce de la noche y el mediodía de hoy. Las intensas lluvias registradas durante la última madrugada y a lo largo de esta mañana han aumentado más el caudal de arroyos, gargantas y ríos de la zona norte de la provincia de Cáceres.

Algunos de estos arroyos se han desbordado, como ocurre con el de Cuaternos, que ha vuelto a anegar algunas parcelas de cultivo, próximas al cauce del Tiétar. Por su parte, este río registraba esta mañana una gran crecida. Sin embargo, el ganadero de la pedanía de Valdeíñigos, Valentín Linio, indica que el nivel de la corriente no alcanzaba cotas próximas al desbordamiento.

Por lo que respecta a las gargantas de La Vera, todas ellas han experimentado una gran subida en las últimas horas, lo que ha hecho que la garganta de Pedrochate haya anegado toda la zona de arena del Lago Alonso Vega, quedándose a pocos centímetros para subir al restaurante que ha sido construido recientemente en aquel lugar de baños.

Por otra parte, una dotación de bomberos de Plasencia se ha desplazado al municipio de Jerte ante el temor de los vecinos de que una casa vieja se derrumbase por la lluvia. Los bomberos señalan que, tras inspeccionar el estado del inmueble, ya apuntalado, no ha sido necesaria ninguna otra intervención.

El ganado también está encontrando dificultades para alimentarse en esta jornada lluviosa, ya que todo el campo está cubierto por un manto de agua.

Aparte de los contratiempos y molestias ocasionadas por la tromba de agua; la lluvia también tiene su cara amable, que ha sacado esta mañana a bastantes personas de sus casas para contemplar y fotografiar el espectáculo que ofrecen las diferentes corrientes de agua.