Con Los tres cerditos , la música de Mozart entra mejor. Al menos a los niños. Algunos adultos ya se sabe que ponen el grito en el cielo si de repente se enfrentan a un Don Giovanni ambientada en un burdel con amantes exhibiendo sus dotes de prostitutas.

Pero los niños, más inocentes , se muestran más abiertos a operaciones similares (eso sí, adecuadas para ellos). Y esto es lo que ocurre en esta versión de uno de los cuentos infantiles más populares, que se presenta como una arriesgada operación atractiva para suscitar en ellos, digamos, el amor a la ópera.

La ocurrencia fue de Carlos Amat, que concibió la idea y su desarrollo, como mañana y el domingo podrá verse en Extremadura.

Amat escogió algunos de los fragmentos de las óperas más populares del compositor austríaco: Cosi fan tutte , Las bodas de Fígaro , La flauta mágica y Don Giovanni . Con ellos hizo una operación de ajuste a la historia de un lobo hambriento que persigue a tres cerdos, refugiados sucesivamente en una casa de paja, una de madera y una de ladrillo.

Esta es una propuesta insólita, sin precedentes, según Amat, dentro y fuera de España. Recuerda, sin embargo, que existen óperas infantiles como El gato con botas , de Montsalvage, o una versión de La cenicienta de Rossini; pero no esta mezcla heterogénea de materiales.

Compuesta para cuatro voces, dos masculinas y dos femeninas, y orquesta de cámara, esta producción del Ayuntamiento de Valencia y el grupo Tornaveu lleva más de cien funciones desde su estreno en el 2005 hace ahora dos años, lo que apunta a su solvencia.

VERSION PARA PIANO "El objetivo era atraer a los niños a la ópera", afirma Amat, coautor del libreto, junto a Ana Lara, y director musical. En la versión que se verá en Badajoz y Mérida, sin embargo, la música de la función la pondrá un piano en lugar de la orquesta de cámara que suele participar en otras funciones.

"Es imposible que a los niños no les guste la música de Mozart", señala Carlos Amat sobre la elección de los temas más apropiados para componer con ellos una ópera singular. La música ya está compuesta, el relato original también. Lo novedoso es su fusión, que posiblemente resultará extraña para los adultos, pero natural para los menores. "Teníamos al principio cierto escepticismo sobre su resultado, pero a la vista de la respuesta puede decirse que ha tenido éxito".

RECUENTO DE JAMONES

Algo, sin embargo, de la línea argumental de estos fragmentos operísticos queda en el trasvase de su argumento, hábilmente modificados para la versión infantil. Vemos cómo la escena en que Leporello hace un recuento de las amantes que su señor Don Giovanni ha tenido en diversos países, se transforma en Los tres cerditos en el recuento que hace uno de ellos de los jamones que el lobo ha comido en diferentes lugares de España: Extremadura (400), Guijuelo, Teruel (500)... más de mil en su insaciable hambre.

Todo cuento tiene su moraleja y esta ópera no escapa a ello: la unión de los más débiles hace la fuerza frente a los más fuertes. Sólo así los tres hermanos podrán enfrentarse al lobo.

Pero los caracteres de esta obra no son cerrados: dos de los hermanos, explica Amat, son perezosos y deberán enmendarse. El canino, sin embargo, actúa por hambre, no tanto por maldad. Y así se debate sobre si comerá carne o tendrá que conformarse con verduras. "Le damos una visión humana".

No es la única función infantil de este fin de semana en la región. La Sala Trajano de Mérida

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