La consejera de Igualdad y Empleo, Pilar Lucio, explicó ayer en la Comisión de la Adopción del Senado cómo aborda Extremadura la protección de los menores en desamparo, la problemática de la adopción y los temas relacionados con ella, como el acogimiento y la institucionalización o tutela de estos.

En su comparecencia, ha defendido la importancia de la atención a la infancia y las familias para favorecer la permanencia de los niños en su medio familiar y social, y de la figura del acogimiento como recurso alternativo al ofrecer un hogar familiar normalizado y responder mejor a las necesidades del niño, según informó la Junta.

La consejera ha defendido una política transversal de atención a la infancia y las familias, en la que es fundamental la colaboración entre administraciones para agilizar y simplificar los trámites y lograr una mayor rapidez en la resolución de estas situaciones.

ACOGIMIENTO Lucio ha defendido el acogimiento familiar, tanto en su modalidad de familia extensa como ajena, por ser la figura que mejor puede responder a las necesidades del menor, al ofrecer un hogar familiar normalizado, que minimiza las rupturas vitales y personales que otras medidas implican.

En esta línea, ha considerado esencial proporcionar un apoyo institucional, técnico y económico a las familias acogedoras, coherente con la enorme función social que desempeñan estas familias.

La consejera ha indicado que, en mayor o menor medidas, las comunidades autónomas conceden a los acogedores prestaciones económicas. Sin embargo, ha expresado que sería necesario revisar el tratamiento fiscal de estas ayudas.

También se ha mostrado a favor de que la Ley de Familias Numerosas contemple como beneficiarias de las prestaciones a las que tienen menores en acogimiento, ya que la duración de estos suele ser inicialmente de uno o dos años prorrogables.