Ha tenido que esperar más de un año para presentar en Extremadura ´En esta esquina del tiempo´, un disco con poemas de José Saramago

Portugal es uno de los paisajes de Luis Pastor (Berzocana, 1952). Lo recuerda como un espacio de frontera por donde menudeaba el contrabando de café. Luego fue la música de intérpretes como José Afonso, de quien estuvo cantando canciones en Madrid durante algún tiempo. Y simultáneamente el idioma, su ritmo, su sonoridad.

Quería grabar un disco con canciones de Afonso. Pero el escritor José Saramago se cruzó enmedio hace tres años, cuando le regaló en Lanzarote un libro de poemas. Pastor lo leyó en el avión y pensó que podría ponerle música a algunos versos. Y durante dos o tres días de una semana, en un proceso creativo rapidísimo "salieron las canciones" (14) de En esta esquina del tiempo .

El libro que acompaña el disco incluye las letras en español y portugués, además de textos de Pilar del Río y Saramago, y dibujos de Javier Fernández de Molina. Publicado a finales del 2007, hoy lo presenta en Cáceres acompañado de Luis Fernández (teclados), Antonio Toledo (guitarra), Javier Saiz (bajo) y Nacho Arimany (batería).

--A Saramago le alteró su mala pronunciación portuguesa.

--Yo he tenido la mala costumbre de cantar el portugués a mi manera, a lo portuñol, y cuando él escuchó las canciones las primeras veces se echó las manos a la cabeza. Así que grabó con su voz todos los poemas y yo intenté ajustar la pronunciación.

--¿Puede describir su relación con Saramago?

--Sin ella, no habría hecho este disco. Yo lo conocí en un concierto de Pedro Guerra en Lanzarote, que había puesto música a cinco poemas de José. Hubo una reunión en su casa y me invitaron. Congeniamos y en mis sucesivas visitas a la isla para cantar o presentar discos me acercaba a su casa a visitarle. Y de ella siempre he salido con un libro bajo el brazo hasta ese día en que me regaló su poesía. Luego hemos coincidido en actos políticos o públicos. Pero más allá de ellos yo lo he sentido presente. Este disco ha sido como un encuentro entre dos creadores.

--Cuando tantos músicos de su época se han retirado, usted sigue cantando, componiendo canciones, manteniendo una carrera como hacen los escritores o los pintores.

--Yo me retiré durante tres años a finales de los 70 e hice mi autocrítica. Y eso me ayudó a comprender que este es un oficio de náufragos. Durante tres décadas he pasado momentos de dudas. Pero desde 1992, sobre todo, he mirado hacia adelante, con propuestas como los disco-libros que he publica. Y ahora se me ha abierto una vía para que mis canciones puedan cantarlas otros músicos. En el próximo disco de La Negra habrá temas míos y para su nuevo álbum, Cesaria Evora ha aceptado una de mis canciones. Otra la cantará Gala Evora en su primer disco en solitario, y mando canciones a músicos portugueses. De manera que he hecho mis equilibrios sin perder la felicidad, la alegría por un trabajo que no es un trabajo, que es un placer.