La finada, una oveja de peluche --con la pata convenientemente estirada-- colocada en un ataúd y los dolientes, directivos de la organización agraria Apag vestidos de riguroso luto. Coronas de flores e incienso en un velatorio celebrado ante la Consejería de Agricultura y Desarrollo Rural, con el que se quiso simbolizar la situación del sector ovino, según Apag, a punto de ser sepultado por una crisis originada por la caída de precios de la carne unida a la subida de los piensos, y al que la lengua azul ha dado casi la puntilla.

Bibiano Serrano, presidente de Apag, abandonaba temporalmente el duelo para señalar que el acto es un toque de atención a las administraciones para que afronten la crisis como lo que a su juicio es, un problema estructural que se arrastra desde hace tres años y que en los últimos doce meses habría provocado pérdidas de 100 millones de euros, al margen de los estragos causados por la lengua azul, enfermedad que según Apag ha provocado ya 34.000 muertes.

Respecto a esta última cuestión, Serrano asegura que se actuó tarde y mal, puesto que hace ocho meses que se sabía que el serotipo que ahora afecta a Extremadura estaba en Marruecos. Por establecer un símil, el dirigente agrario se preguntó "si alguien se imagina que para que se vacunase contra la gripe fuera necesario que murieran 34.000 personas". Según aseguró, el Ministerio de Agricultura "no se ha tomado en serio la lengua azul hasta que el problema se ha desbordado".

A su juicio, las ayudas (seis euros por oveja y reparto de medio millón de derechos de ovino) no son ni de lejos suficientes dada la magnitud que ha alcanzado la crisis. Por ello, exige medidas más concretas y resolutivas, "porque ya se acabó el tiempo del ´vamos a ver y vamos a pensar".

Entre estas medidas estarían una ayuda de 6.000 euros por ganadero, créditos al 0% con dos años de carencia, condonación de deudas con la Seguridad Social, reducción al 0% de los módulos del IRPF, aumento del IVA repercutido al ganadero, desacoplamiento total de las ayudas y desclasificación de la lengua azul como enfermedad de declaración obligatoria.

De no concretarse estas soluciones, Apag se uniría a la convocatoria nacional de una manifestación en Madrid el próximo día 29 de noviembre, convocada por Asaja, COAG y UPA, en defensa del sector ganadero.

Mientras, tanto Asaja como UPA han iniciado reuniones comarcales con los ganaderos para informarles de la situación y de las demandas que plantea el sector. Por su parte el PP de Alcántara y Valle del Alagón reunió el martes a 70 ganaderos para trasladarles las propuestas que los populares han planteado ante la crisis y criticar la actuación de la Administración a la hora de abordar el problema.