El Parlamento regional aprobó ayer por unanimidad la Ley de Igualdad Social de Lesbianas, Gais, Bisexuales, Transgéneros, Transexuales e Intersexuales (LGTBI) de Extremadura, el texto más avanzado de España para la igualdad del colectivo homosexual, que todos los grupos parlamentarios han calificado de "histórico". Activistas y organizaciones LGTB han asistido al debate final y votación de la norma desde la tribuna del público, donde la aprobación de la propuesta de ley, presentada por el PP, ha sido recibida con una gran ovación a la que se han sumado los parlamentarios desde sus escaños.

La norma garantiza la financiación pública de la reproducción asistida a las lesbianas y bisexuales así como las operaciones de cambio de sexo, además de la protección ante la denominada "violencia intragénero", entre las parejas del mismo sexo. También crea un protocolo policial ante delitos de odio que se basen en la homofobia y la transfobia y establece un régimen de infracciones y sanciones contra la discriminación sexual que puede ser de hasta 45.000 euros en los casos muy graves.

En la defensa de la propuesta, la diputada popular Francisca Rosa resaltó que iniciativas como esta dignifican la política, ya que con ella se avanza hacia una sociedad más justa e igualitaria. Al margen del contenido, consideró esta ley un "homenaje" a las personas que han sufrido la intolerancia, aunque el dolor es difícil de reparar. Rosa valoró la "sensibilidad" del Gobierno regional en este asunto y su disposición a acercar posiciones hasta el último momento, ya que ayer se votaron las últimas enmiendas que no se habían incorporado al texto en comisión, 13 de ellas presentadas conjuntamente.

La diputada socialista Isabel Gil Rosiña consideró que la sesión de ayer debería ser recordada por el paso adelante dado en favor de los derechos del colectivo LTGB. "No se trata de creer en la igualdad sino de tomar decisiones que la hagan posible", apuntó Gil Rosiña, que destacó la firmeza en las convicciones de su partido, al apoyar una norma a pesar de haber sido presentada por el PP.

PAULINA Y ENCARNA El diputado de IU Víctor Casco ha recordado el caso de Paulina y Encarna, presentes en la tribuna, una pareja de lesbianas que tuvieron que irse de Extremadura. Casco ha recibido la llegada de esta ley con "emoción", ya que garantiza que nadie sea perseguido e injuriado por querer ser amado por otro ser humano. El parlamentario de IU, que hace tiempo confesó su homosexualidad, destacó la histórica lucha de mucha gente para conseguir aprobar esta ley por unanimidad. "Nunca más ni armarios ni prisiones" dijo Casco en su despedida de la primera línea política, antes de anunciar solemnemente que su grupo pulsaría el botón del sí.

Por su parte, la diputada del Prex-Crex Fernanda Avila consideró importantísimo que se reconozca en la exposición de motivos de la ley la "memoria histórica" de las personas que han sufrido este problema. A su juicio, éste es el camino para cambiar la historia de Extremadura y hacer más feliz a la gente. Por último, Avila resaltó la voluntad de la Junta y de la oposición para sacar adelante la norma, y el trabajo de los activistas LGTB.

El presidente de la Fundación Triángulo, José María Núñez, aseguró tras la aprobación de esta norma, la segunda a nivel estatal tras la catalana, que Extremadura "ha lanzado un grito de igualdad" en todos los planos para el colectivo.

Núñez subrayó que la igualdad social es un derecho que va mucho más allá del matrimonio. Se mostró "muy emocionado", ya que hay gente que ha sufrido mucho, y calificó de "histórico" lo que ha hecho Extremadura, una región, apuntó, "donde parecía siempre que era el sitio donde peor se vivía y donde peor se podían disfrutar de estas emociones y la igualdad". Núñez reclamó una ley estatal para que todos los españoles estén igual de protegidos e indicó que la norma extremeña avanza respecto a la catalana al ser posterior. Entre las medidas que incluye, destacó que considera las agresiones por orientación sexual como "agresiones de odio" y aborda la protección de las víctimas. Además, consolida derechos que ya estaban reconocidos como la atención integral a los transexuales o la reproducción asistida para lesbianas y bisexuales.