De Madrid y con una estancia media de dos días, sobre todo los fines de semana. Ese es el perfil básico del turista que se aloja en las casas rurales de Extremadura. Durante el pasado año fueron 65.815 los viajeros que ocuparon algunos de estos alojamientos, con una estancia media de 2,2 días y un grado de ocupación cercano al 15% de las plazas (20% en España).

Son datos de la encuesta de ocupación en alojamientos de turismo rural 2005, que acaba de publicar el Instituto Nacional de Estadística (INE). A la vista de las cifras, los madrileños parecen enganchados a la oferta extremeña, ya que la mitad de los visitantes son de esa comunidad autónoma, seguidos por los propios extremeños (un 19%) y andaluces (9%).

Pocos extranjeros

Por el momento, los extranjeros no parecen estar demasiados interesados en este tipo de alojamientos, dado que sólo 3.623 de esos 65.815 ocupantes llegaron desde otros países. Sin embargo, se quedan más tiempo (3,09 días de media frente al 2,1 de los españoles).

Todos ellos registraron un total de 146.220 pernoctaciones (11.202 de ellas de ciudadanos extranjeros), con un grado medio de ocupación de las habitaciones del 16,5%.

Por otro lado, el intenso calor del verano extremeño no parece ser obstáculo para aquellos que prefieren el campo. Es en agosto cuando mayor índice de ocupación se registra en las casas rurales (más del 40% durante los fines de semana y más del 30% el resto del mes), seguido por los meses de marzo, diciembre y julio, con un 21,5; 18 y 16,7%, respectivamente.

La encuesta del INE refleja también que en diciembre pasado se abrieron el mayor número de plazas (266), 250 en noviembre y 248 en octubre. En el lado contrario, la actividad fue menor en enero, febrero y marzo del 2005, con 188, 189 y 199 plazas abiertas, respectivamente. Además, eso influye directamente en el personal que se necesita en los alojamientos rurales, que es menor en invierno, y mayor en primavera, verano y otoño.

A nivel nacional, el pasado año el turismo rural alcanzó los dos millones de turistas, con un grado de ocupación medio del 20% de las plazas, y una estancia media superior a los tres días, con un total de 3.600.000 pernoctaciones. Con en el caso extremeño, los ciudadanos extranjeros permanecieron más tiempo que los españoles, una media de 5,7 frente a 2,8 días.